El caso de Cafayate que resultó positivo ayer y que causó preocupación en los Valles Calchaquíes, corresponde a una mujer de entre 35 a 40 años, que llegó el 19 de mayo procedente de Lanús, Buenos Aries.

La mujer arribó en un vehículo particular junto a su marido, quien también se encontraba en cuarentena en el hotel destinado para repatriados de Cafayate. Ambos fueron trasladados ayer a un sector del hospital cafayateño.

La información fue suministrada anoche a El Tribuno por el director del nosocomio, Carlos Vargas, quien sostuvo que tanto la mujer como su esposo no tenían síntomas y fueron detectados a través de un hisopado que se les efectuó el sábado pasado en el hotel donde permanecían cumpliendo la cuarentena.

"Ambas personas fueron trasladadas a una casa ubicada en el predio del hospital, que estaba destinada a profesionales médicos, pero que fue adaptada para recibir a los pacientes positivos con COVID-19", expresó Vargas.

Anoche una guardia con una camioneta de la Policía impedía el paso hacia el lugar, en las inmediaciones de las calles San Martín y Calchaquí. Según se supo en la mañana, antes de la confirmación del caso positivo, Cafayate esperaba la llegada de otras siete personas repatriadas.

 

El profesional también indicó que los pacientes se encuentran "clínicamente bien, estables, sin necesidad de oxígeno, asintomáticos, sin tos y sin dolor de garganta. Están ubicados en dos habitaciones separadas, controlados y a la espera de otros dos hisopados de prueba que se efectuarán el 7 y el 14 de este mes".

La pareja aislada, tanto la mujer como su marido, son artesanos y habían viajado hasta Lanús para visitar a su familia que vive allá. De retorno y cumpliendo los controles, ingresaron por la ruta 40 donde fueron registrados y controlados en el puesto de Senasa, ubicado a 27 kilómetros al sur de Cafayate.

"Tuvieron un problema mecánico en Tucumán, donde se detuvieron para poder solucionar el inconveniente y aseguran no haber descendido del vehículo en ningún otro lugar", aseguró Vargas. La investigación del nexo epidemiológico llevó el alerta sobre este recorrido y el contacto que tuvieron con los padres y el hermano de la mujer en Buenos Aires.

Malestar

Silvio Aguirre, periodista cafayateño, explicó a El Tribuno que existe malestar en la comunidad y que esta sensación se incrementó ayer tras la confirmación del caso positivo. "Los vecinos de Cafayate se enteraron a través de los medios de Salta capital, y eso causó mucha más molestia. Estaban convocando a una marcha por las calles del pueblo" indicó.

Según Aguirre, el malestar tiene que ver con las versiones nunca aclaradas sobre el aislamiento obligatorio para las personas que están en cuarentena. "En los hoteles dicen que no ingresa nadie de afuera, pero contradictoriamente se les pide a los aislados que lleven su comida todos los días. La gente ve que no existe tal aislamiento", aseguró Aguirre.

Consultado sobre el punto, Vargas admitió esta cuestión, pero aseguró que las personas aisladas en los hoteles reciben externamente alimentos y ropa que son trasladados por personal del COE debidamente protegido.