Los números de las pérdidas del turismo en Salta dan ganas de llorar. Para julio, el mes de la temporada alta local calculan que dejarán de ganar 1.300 millones de pesos. Y es que cualquiera que salga y vea el centro de la ciudad verá que todo es una lágrima.

En años anteriores, toda la ciudad estaba "invadida por los visitantes" que llegaban desde todos lados del mundo. En la terminal de ómnibus programaban refuerzos para los viajes a los Valles Calchaquíes, el teleférico funcionaba lleno todo el día y la 9 de Julio se transformaba en una plaza hiperpolíglota.

Al día de hoy, ya pasando la segunda quincena del mes más fuerte, desde Turismo de la Provincia informaron las cifras aproximadas de lo que no está ingresando de dinero en la Salta. El año pasado, en este mismo mes la inyección de plata rondó los 1.000 millones de pesos.

Para tener una idea de la potencia de Salta, el turismo dejó para nuestra provincia en 2019 unos 7.000 millones de pesos. La cifra enloquece a los estadistas porque ya son varios meses de pandemia.

Ahora bien, esas cifras de 2019 iban a ser superiores para este año y no es sólo una cuestión de inflación, sino también de proyecciones. Para este 2020 estaban dadas todas las condiciones para que la provincia recibiera a 2.200.000 turistas. Se esperaba un año récord para cualquier indicador. El trabajo en turismo trascendió a varias gobernaciones trabajando de la misma manera.

Son todos números base. No son rigurosos, pero sí sirven para tener una dimensión y entender el daño que le causa la cuarentena a la economía local.

Para enero y febrero de este tenebroso 2020 el sector turismo dejó para la provincia 1.000 millones de pesos mensuales. Desde las oficinas que maneja Mario Peña (h) calculan entonces que para marzo, abril, mayo y junio dejaron de ingresar a la provincia unos 4.000 millones de pesos. Y si debemos sumar los 1.300 millones que se espera perder en julio estamos rondando lo 5.500 millones que no estarán y que sirven de sustento para las casi 50.000 familias salteñas que viven vinculadas al turismo.

Pero lo peor quizás sea la falta de un horizonte y la incertidumbre por unos cuanto meses más. Desde el Estado provincial apuntan a que primero se reactive el turismo regional. Según la información que llega desde Nación, recién a mediados de agosto habilitarán a Córdoba para que funciones como centro de conexiones aéreas. Eso quizás mueva un poco más el ritmo lento de los comercios vinculados al sector.

Igual, lo que no saben es cuándo volverán los turistas extranjeros, que en Salta representan el 20 por ciento y que son los que más dinero dejan diariamente.

El año pasado hubo 266 mil arribos

Las comparaciones son chocantes y, en este caso, duras de analizar. Cuando tomamos las cifras que manejó el turismo en julio del 2019, el impacto económico se siente fuerte.
El año pasado, se había señalado que la provincia inyectó, por medio del turismo, durante julio unos $1.000 millones.
En cinco semanas hubo récord en ocupación hotelera, pernocte, movimiento de pasajeros en el aeropuerto Martín Miguel de Güemes, visitas a los diferentes atractivos turísticos, museos, Tren a las Nubes, teleférico, entre otros.
Todo ese movimiento generó que el impacto económico de julio crezca un 41% con relación al mismo mes de 2018, con 266 mil arribos turísticos que, representan un 6% más que el año pasado. Se especificó que del total, el 48% de los arribos se registraron en el interior de la provincia.
Uno de los datos destacados fue el movimiento aeroportuario, con 141 mil pasajeros, un 27% más, marcando también el liderazgo de Salta en el NOA.
Los variados atractivos que ofrece la provincia también estuvieron colmados de visitantes: más de 90.000 turistas en los museos provinciales, casi 12 mil pasajeros en el Tren a las Nubes y 56.756 en el teleférico.