En Salta, desde la primera línea de contención de la pandemia de coronavirus, trabajadores de la salud denuncian que las autoridades sanitarias que les exigen usar solo los elementos de protección de confección profesional para no contagiarse pero que en los hospitales no les proveen la indumentaria que necesitan.
Además, las aseguradoras de riesgos de trabajo (ART) abrieron el paraguas y advierten que no cubrirán la enfermedad de quienes se infecten por no contar con insumos de bioseguridad adecuados. Hoy harán una asamblea para decidir qué medidas tomar y ya se habla de la posibilidad de dejar de atender a pacientes con síntomas.
Al filo del final de la cuarentena obligatoria, que rige hasta el 26 de abril, los profesionales estudian la posibilidad de dejar de atender casos sospechosos. Esta posibilidad se terminaría de definir en la asamblea que se realizará hoy desde temprano en las puertas del hospital Señor del Milagro, donde se realizan los análisis.
En Argentina hay preocupación por la exposición del personal de salud al virus. Los fallecidos son cuatro. En La Rioja murió una pediatra; en Neuquén, un traumatólogo; en Buenos Aires, un enfermero y en Chaco, el director de Salubridad de la Municipalidad de Resistencia.
Si bien en los últimos días, circularon noticias que sostenían que el país tenía uno de los porcentajes más altos de profesionales de la salud entre las personas contagiadas, un informe del medio digital Chequeado indicó que no hay estadísticas que permitan sostener esta afirmación y que no existe ningún registro a nivel mundial sobre el tema. Desde el Ministerio de Salud argentino comunicaron que este porcentaje llegaba al 15,1% el 19 de abril.
Más allá de las cifras, los reclamos del personal por insumos para protegerse se empezaron a hacer escuchar en Salta.
Cada noche a las 21, se aplaude a "la primera línea", la emoción cala los huesos por el reconocimiento a quienes arriesgan su vida. Pero, desde los gremios afirman que "eso no se traduce en presupuesto".
"Estamos bien con los aplausos de las noches, pero que nos den los insumos", solicitó un médico que pidió dejar su nombre en reserva.
Ayer, desde la Dirección de Farmacia del Ministerio de Salud Pública se comunicó que "se dispensa a todos los equipos de salud de los hospitales de la Provincia de los equipos de protección personal avalados por Anmat (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) para la atención de pacientes infecciosos".
"Estamos permanentemente evaluando con los equipos multidisciplinarios las necesidades de todo el personal de salud de la provincia para que a ningún empleado le falte la protección al momento de atender pacientes con coronavirus", afirmó Marcela Mandrile, directora de Farmacia.
Sin embargo, entre los médicos hay incertidumbre y el detonante del malestar fue un comunicado de la cartera de Salud provincial en el que informan que no se harán responsables de los profesionales que se contagien a menos que hayan utilizado los elementos de protección autorizados por Anmat.
"Mañana (por hoy), vamos a hacer una asamblea con médicos de todos los hospitales e incluso del interior que ya dijeron que vendrán", indicó el médico Marcelo Bidone del hospital del Milagro. Consultado sobre si harán paro, señaló que analizan dejar de atender "a personas que presentes síntomas".
En aislamiento
Profesionales explican que para tratar a un paciente en aislamiento se necesitan 25 kits diarios y que quienes manipulan las muestras en el hospital del Milagro deben utilizar trajes "hidrorepelentes".
"Hoy liberaron 3 camisolines y 2 mamelucos gracias a la visibilización", indicó el abogado de Asociación Interhospitalaria Profesionales de Salud de Salta (Asinprosasa.), Telmo Albornoz.
Asinprosasa es el nuevo gremio de médicos del hospital del Milagro y San Bernardo. La intención del sindicato, que "se estrenó" con la pandemia, es incluir a profesionales de otros centros públicos y privados.
Los equipos de protección personal (EPP) que se exigen son barbijos N95 o quirúrgicos, además de mamelucos impermeables, antiparras y botas.
Su flamante secretario general, Juan Carlos Erazu, reconocido militante por los derechos del personal sanitario, alertó que hay una reciente y escasa provisión de material que desnuda falta de planificación.
"Tendría que haber sucedido apenas comenzó esto, porque estamos terminando la cuarentena rígida, y recién están llegando", analizó, al mismo tiempo que recordó que "no hay que relajarse".
ART
A partir de que la pandemia se convirtió en una amenaza cercana para la Argentina, desde diferentes organismos públicos, empresas y particulares donaron telas para confeccionar barbijos, batas y mamelucos. Pero las normas de la Anmat exigen que los elementos cumplan con estrictas medidas de seguridad que no se pueden alcanzar en cualquier taller de costura.
"Desde la propia gerencia (del Milagro) elaboraron barbijos, botas camisolines, mamelucos o monitos y cofias. Lo casero puede tener buena voluntad, pero no cumple con la calidad necesaria", indicó el abogado de los médicos.
Albornoz recordó que el decreto 367/20 determinó al COVID-19 como enfermedad profesional. Pero alertó que las ART "únicamente se harán cargo si se usan equipos que estén confeccionados y avalados por la Anmat".
Además, solo cubrirían a aquellos que estén en relación de dependencia. "Hay muchos contratados que quedarían por fuera de la cobertura", advirtió el letrado.
Profesionales sanitarios denuncian que trabajan con camisolines cortos, que no son impermeables y con barbijos que tampoco cumplen con la calidad necesaria.
Erazu resaltó que la pandemia dejó al descubierto un frágil sistema sanitario mundial, escenario del que Salta no queda ajena.
"Esta es una carencia que se arrastra hace muchos años y sobre la cual la venimos advirtiendo. Siempre estuvimos peleando por esta situación. En el San Bernardo siempre estuvimos carentes de respiradores, por eso fui a hablar con el ministro anterior. Los respiradores eran alquilados", indicó Erazu.
Ayer por la mañana, trabajadores del hospital San Bernardo se manifestaron en contra de los traslados de personal al hospital Papa Francisco, institución de cabecera para el tratamiento de pacientes con COVID-19.
Para hoy, se anticipó que los trabajadores de la salud harían una manifestación y corte de tránsito frente al Hospital del Milagro para reclamar respuestas claras.