El gobernador Gustavo Sáenz se interiorizó del funcionamiento general del hospital Papa Francisco, especialmente de la unidad de terapia intensiva que en las últimas semanas sumó más camas, con 31 operativas actualmente. La ampliación realizada permitió reforzar el servicio para la atención de pacientes con coranavirus. Lo acompañaron en la recorrida el diputado nacional, Miguel Nanni y el intendente de Tartagal, Mario Mimessi.
El Papa Francisco fue transformado en centro de referencia COVID-19 desde el inicio de la pandemia. La inversión realizada por el Gobierno de la Provincia a través del Ministerio de Infraestructura eleva el nivel de respuesta: “Como siempre digo es una inversión y no un gasto, y es lo que la salud pública necesitaba”, indicó el gobernador Sáenz.
“Soy un agradecido de todo el sistema por su esfuerzo tan grande”, indicó el mandatario mencionando a médicos, enfermeros, camilleros y a todo el personal de la salud. En este punto, hizo mención al trabajo que se lleva adelante para “descentralizar la salud y que la gente pueda ser atendida dignamente en sus lugares”, con fuertes inversiones en hospitales cabeceras y otros establecimientos.
En la recorrida, el mandatario dialogó con el personal quienes agradecieron su visita porque “para nosotros es muy importante y un respaldo a lo que hacemos”.
El ministro de Infraestructura Sergio Camacho indicó al gobernador Sáenz las características de la obra de ampliación realizada en el hospital como en la escuela 4811 Crucero Ara General Belgrano que también en el inicio de la pandemia fue reacondicionada para la internación de pacientes leves y moderados. El establecimiento educativo está ubicado al frente del Papa Francisco y también fue recorrido por el mandatario.
Ricardo León, jefe de terapia intensiva, fue quien informó sobre el funcionamiento de esa unidad y destacó la importancia del esfuerzo oficial para dotar a los centros asistenciales de nuevas herramientas para hacer frente a esta situación.