El argentino Kevin Benavides, a bordo de su vehículo Honda, se adjudicó este viernes el Rally Dakar 2021 en la categoría motos, tras la finalización de la 12ª etapa, que se llevó a cabo entre las localidades Yanbu y Yedá, en Arabia Saudita, y que fue obtenida por el estadounidense Ricky Brabec, de la misma escudería.
En la clasificación general, Benavides conquistó la prueba con 4 minutos y 56 segundos de diferencia sobre Brabec, que terminó segundo, y con 15 minutos y 57 segundos sobre el británico Sam Sunderland, del equipo KTM.
El campeón argentino y latinoamericano del enduro, de 32 años, debutó en el Rally Dakar en 2016 y ya marcó el territorio obteniendo el cuarto puesto en la tabla general. En 2018 se ubicó segundo y este año, en su quinta participación, logró el título.
La categoría motos llegó a la última jornada con mucha expectativa, dado que el jueves, tras el final de la 11ª etapa, los tres primeros (Benavides, Sunderland y Brabec) estaban separados por menos de diez minutos de diferencia.
Ese día, Sunderland había aprovechado los problemas de los pilotos de Honda para ganar la anteúltima etapa y recortar distancias. Sin embargo, la jornada final fue fatal para Sunderland y terminó en el 12° lugar. De esta forma, la consagración fue para Benavides, que hoy llegó segundo, a 2 minutos y 17 segundos de Brabec, 4 minutos y 13 segundos antes que el austríaco Matthias Walkner (KTM), que arribó en la tercera colocación.
El argentino le sacó más de cuatro minutos a su escolta (REUTERS/Hamad I Mohammed)
De esta manera, el piloto de Honda se convirtió en el primer argentino que consigue ganar el Rally Dakar en una de las dos categorías principales. Hasta ahora los únicos que habían logrado una hazaña similar habían sido los hermanos Patronelli, Alejandro en 2011 y 2012 y Marcos en 2010, 2013 y 2016, y Nicolás Cavigliasso (en 2019), pero todos ellos lo hicieron en cuatriciclos.
Por otra parte, en la categoría cuatriciclos, otro representante albiceleste, Manuel Andújar, llegó a la última etapa con todo a favor para quedarse con la gloria. El piloto oriundo de Lobos viene de clasificarse segundo en prueba del jueves e inició la jornada definitiva, que aún se está desarrollando, con una ventaja de 25 minutos y 52 segundos en relación a su inmediato perseguidor.
El camino hacia Arabia Saudita
En 2017, cuando apenas faltaban 15 días para la largada del Dakar, Benavides sufrió una fractura en la mano durante un entrenamiento que lo dejó afuera de la prueba, por lo que para volver a competir tuvo que esperar hasta la siguiente edición, en la que el circuito unió Perú, Bolivia y Argentina.
La primera participación de Kevin Benavides en el Dakar fue en el 2016 (REUTERS/Hamad I Mohammed)
En aquella oportunidad, Kevin peleó palmo a palmo con los pilotos de punta hasta que en la etapa 10 se perdió, resignando en parte sus chances de victoria. El segundo escalón del podio fue un premio y a la vez un desafío.
En esa temporada luchó por el cetro mundial FIM de Rally Cross Country, pero sendas caídas en el Desafío Ruta 40 y en la fecha final de Marruecos, le impidieron luchar por el campeonato.
Finalmente, Benavides recibió una dura penalización de tres horas a tres etapas del final, por llevar supuestamente a bordo información no incluida en el road book. Esa circunstancia afectó su performance y ello, sumado al cambio de motor, lo dejó en el puesto 12, aunque 2 meses más tarde se lo reclasificó quinto.
Honda había ganado el rally en la edición del 2020 (REUTERS/Hamad I Mohammed)
Posteriormente, en la edición del año pasado, el argentino mostró un ritmo de carrera excepcional, logrando incluso una victoria de etapa, pero en la sexta jornada el motor de su Honda se rompió a 44 km del final. Quedó en medio de las dunas y perdió cuatro horas para salir de allí.
Luego le llegó una nueva penalización por el cambio de motor que lo dejó en el puesto 19, mientras el equipo se llevó el triunfo a través de Ricky Brabec, lo que representó el primer logro de la marca ocho años después de su retorno a la carrera más dura del mundo y más de 30 años después de su última victoria.
“El 2020 fue un buen Dakar para mí. Mi trabajo fue muy bueno, gané etapas, estuve tres veces en posición de podio. Luego sobrevino la falla del motor y me costó cuatro horas salir del desierto y luego los 15 minutos de penalización. No pude pelear por la general, es cierto, pero fue una buena carrera en la que sufrí una falla importante”, sostuvo Benavides al respecto.
Sobre la edición de la que estaba a punto de participar y que luego ganaría, el argentino resaltó que se había preparado, ya que la cuarentena le sirvió para recuperarse de las lesiones y “hacer un trabajo físico continuo”.
“El desierto saudí me gustó porque es muy diverso, muy bonito, muy grande y permite hacer un buen proyecto de Dakar a futuro”, señaló el piloto, que adelantó que iba “a dar el 100% trabajando día a día para lograr el sueño” de ganar esta carrera.