Otra vez Juventud Antoniana no supo resolverlo. Y esta vez lo merecía porque fue más que su rival. Pero la victoria se le escapó sobre el final del partido y terminó igualando el clásico con Gimnasia y Tiro 1 a 1, en el partido de ida de la fase Preliminar Regional de la Copa Argentina.
El clásico arrancó con muy pocas ideas, las imprecisiones se multiplicaron en ambos equipos, más un notable falta de peso ofensivo en las áreas.
En santo fue de menor a mayor y encontró con el correr de los minutos un pizca de claridad. Esto no significa que fue ampliamente superior pero logró inquietar a su rival. Gustavo Mendoza intentó hacer la diferencia con ciertos tramos de lucidez. “Momoto” Gómez intervino en algunas oportunidad y Leandro Zárate cumplió con su función de centrodelantero para incomodar a la defensa del albo y ganándole la pulseada a Gabriel Pusula. Este defensor tuvo que recurrir a la infracción para contrarrestar los embates de la Chancha.
A Gimnasia la faltó de ritmo futbolístico y quedó expuesto en su juego. Uno de los mayores déficit lo padeció en el mediocampo, donde Macoritto no logró hacer pie. Además, el desempeño de Joaquín Mateo, quien regresó luego de superar una lesión, no fue buena, aunque intentó jugar y marcar la diferencia con su velocidad. Pero el juvenil del albo estuvo muy impreciso, como todo el equipo.
Tampoco fue la noche de Luciano Herrera, quien aportó muy poco en el ataque. No logró supera la marca de Juan Pablo Cárdenas, pero sobre el final de la primera mitad pudo haber puesto en ventaja a su equipo: a los 45 minutos recibió un centro en profundidad, quedó mano a mano con Ángel Pedroso pero no supo vulnerarlo. Además, hubo una gran intervención del arquero antoniano para mantener la valla en cero.
En la segunda mitad, Juventud mejoró su trabajo y consiguió mayor claridad pero si demasiada profundidad buscó ponerse en ventaja. Y Gimnasia estuvo otra vez muy cerca de abrir el partido cuando a los 13 minutos otra vez Herrera no pudo vencer la resistencia de Pedroso. El albo mostró una leve mejoría en su juego, aunque careció de peso ofensivo. Generó algunas opciones pero no fue suficiente.
El equipo de Salvador Mónaco, quien vio el partido desde la tribuna, no se resignó y continuó con la búsqueda del gol, que finalmente llegó de la forma menos pensada: el arquero Mauro Leguiza se apresuró en la salida, Enzo Salinas, de buen debut, la bajó de pecho, habilitó Mauro Cachi y este con gran jerarquía definió por arriba del “uno” millonario. Fue un golazo del santo para ponerse en ventaja. 
Los dirigidos por Daniel Ramasco, con mucho amor, buscaron la igualdad, hasta que sobre el final Matías Macoritto fue derribado por Pedroso y Fabio Giménez se encargó marcar el agónico gol de la igualdad.

• Las formaciones

Juventud: Pedroso; N. Pérez, Gogna, Cárdenas y Salinas; Mendoza, Ortíz, Cachi y Montero; R. Gómez y Zárate. DT: Salvador Mónaco.

Gimnasia: Leguiza; Hereñu, A. Herrera, Pusula y Fabio Giménez; Iturrieta, Marocco y Ezequiel Giménez; Morete; Herrera y Martínez. DT: Daniel Ramasco.

Goles: ST: 15’ Mauro Cachi (J), 40’ Fabio Giménez (G), de penal.    
Cambios: ST: 7’ G. Ibáñez por Ortiz (J), M. Macoritto por Marocco (G), 28’ J. Díaz por Cachi (J), 30’ J. Pereyra por Mateo (G), 35’ Chavarría por Montero (J), 42’ Riera por Herrera (G).    

Jornada: Partido de ida.    
Estadio: Padre Martearena.    
Árbitro: Carlos Gariano.