El Gobierno "enfría" la definición del ajuste en el gasto público a la espera del acuerdo por el préstamo de U$S 30 mil millones del FMI. Para hoy estaba previsto que el ministro de Hacienda y coordinador económico Nicolás Dujovne volviera a recibir a sus pares, que iban a presentarle un plan de recorte de gastos para reducir el déficit fiscal. Pero la reunión se suspendió, a la espera de tener "abrochado" el acuerdo, para tener los números sobre la mesa sobre el que será el ajuste prometido al Fondo Monetario Internacional, una de las principales exigencias del organismo para otorgar el préstamo.
El FMI dijo que las negociaciones por el crédito preventivo están "bien avanzadas". Así lo anunció el director del Departamento del Hemisferio Occidental del organismo, Alejandro Werner, que explicó que el acuerdo será sobre la base de un plan "impulsado por las prioridades del gobierno argentino". El organismo aportará U$S 30 mil millones, a lo que se sumarían otros US$ 5.000 millones del Banco Mundial, el BID (Banco Interamericano de Desarrollo) y la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina).
El organismo internacional y el Gobierno determinarán metas de reducción del déficit fiscal para este año y el 2019, con el objetivo de llegar al equilibrio fiscal. El Ejecutivo recortó su meta para este año de 3,2% a 2,7% a principios de mayo, y podría volver reducirla a 2,5%. Para el año que viene la diferencia entre los ingresos y los gastos oscilaría entre 1,5% y 1,7%.
Días atrás Dujovne y su par de Modernización Andrés Ibarra, presentaron el "plan de control y reducción de gastos", con el que el Gobierno espera ahorrar $ 20.000 millones. Las medidas, presentadas como un simbólico ajuste en el gasto político, incluyen el congelamiento en las contrataciones de personal y la no renovación de7.000 contratos con empleados públicos, que actualmente facturan a través de convenios con universidades públicas.
La intención del Gobierno es acordar antes de fin de mes el préstamo por US$ 30 mil millones que le permita al presidente Mauricio Macri gobernar sin sobresaltos financieros el resto de su mandato, para darle un mensaje al mercado cambiario y evitar así una nueva escalada del dólar.
En la Casa Rosada creen que así quedará superada la turbulencia cambiaria y podrán concentrarse en políticas para consolidar el crecimiento para este año. Al garantizar los pagos de deuda el Gobierno cree que volverá la paz cambiaria y podrá poner todos los esfuerzos en el combate contra la inflación, que se proyecta por encima del 25% para este año, según estimaciones de las principales consultoras privadas.
El jueves, en conferencia de prensa, el Presidente adelantó que el acuerdo con el FMI se cerraría "en estos días". Esta semana Macri viaja a Canadá a la cumbre del G7, donde se encontrará con la directora gerente del Fondo Christine Lagarde. Esto permitiría acelerar el préstamo con el organismo internacional.
Fuente: TN