El mes pasado había en actividad 417 empresas dedicadas a las construcción en la provincia. Son 24 menos de las que había en julio de 2017, según el último informe del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric).
Salta fue uno de los once distritos del país que registraron cierres en la cantidad de constructoras y el cuarto peor ubicado en ese dramático ranking. A nivel nacional se mantuvo igual la cantidad de firmas en la comparación interanual.
En cuanto al empleo formal, en junio hubo 7.618 obreros contratados con los aportes correspondientes, un 12 por ciento menos que en el mismo mes del año pasado.
Durante el primer semestre los puestos de trabajo se fueron perdiendo mes a mes: arrancó enero con 8.036 trabajadores registrados y terminó en junio con 400 menos.
En total, según los registros del sindicato de la Uocra (Unión Obrera de la Construcción), unas tres mil personas quedaron desempleadas en la construcción salteña en los primeros seis meses del año, entre trabajo formal e informal.
Para lo que resta del año el panorama en la construcción no es bueno, pero en el 2019 la situación pinta aún peor. Desde la Nación anticiparon que el recorte en la obra pública durante el año próximo será del 50% con respecto al actual período. Hay que descontar, además, otros recursos que se usaban para obras como los que el Gobierno nacional coparticipaba por las retenciones a la exportación de la soja.
En tanto, los proyectos con financiamiento privado, con los que se esperaba suplantar al ajuste de fondos públicos, están en duda por la precaria situación económica que atraviesa el país.
Fuente: El Tribuno