La baja de las acciones en Wall Street ante la suba de las tasas de los bonos de Estados Unidos le pega a la Argentina por distintos flancos.
Cada vez que se incrementa el rendimiento de los bonos del Tesoro norteamericano -ayer llegó a tocar 2,885%, su máximo en cuatro años, ante la expectativa de que el nuevo titular de la Reserva Federal (el Banco Central) suba las tasas- los inversores suelen dejar otros activos y apostar a esos títulos, que son los más seguros del mundo.
A ese movimiento, se sumó también una "toma de ganancias": el índice Dow Jones de Estados Unidos venía subiendo con fuerza desde principio de año (hasta el lunes había avanzado 6,5%). Los inversores venden porque creen que ya no va a subir más y recolectan las ganancias de la suba.
Si la tasa del bono más seguro del mundo sube, para tomar cualquier riesgo comprando otro tipo de activos (deuda de países emergentes o de empresas, por ejemplo), los inversores piden más rendimiento por su dinero, es decir, más tasa. Así, a la Argentina le costará más caro emitir deuda. Es lo que se llama el riesgo país: la diferencia entre el rendimiento de los bonos locales vs. los estadounidenses.
Por eso, varios economistas reinvindican la colocación por US$ 9.000 millones que hizo el ministro de Finanzas Luis Caputo en enero y que representaban un tercio del programa financiero para 2018. Sin embargo, aún será necesario colocar más títulos, fondos que el Gobierno está utilizando para financiar el déficit fiscal. Esta situación crea otra luz de alerta: ¿será necesario apurar el gradualismo en el ajuste del gasto y en la reducción de subsidios ante el encarecimiento del dinero?
Y a las compañías les pasará lo mismo a la hora de buscar fondos. Un ejemplo de esto fueron las colocaciones de acciones de la semana pasada -cuando ya habían comenzado las turbulencias- de Corporacion America Airports y Central Puerto. Ambas empresas tuvieron que bajar el precio de sus acciones para poder venderlas y conseguir el dinero para sus proyectos. A su vez, una baja de sus acciones en la Bolsa, una vez que están cotizando, genera una reducción en el valor total de la empresa.
La biotecnológica Bioceres, en tanto, suspendió el lunes su salida a la Bolsa de Nueva York y aún debe decidir si sigue adelante con sus planes.
También las compañías pedirán más retorno a sus proyectos productivos en el país, lo que podría frenar inversiones. Si un bono de Estados Unidos rinde 2,8%, ¿cuánto pedirán los inversores para sacar su plata de ese activo y ponerlo en un mercado emergente, con una economía aún en recuperación?
Fuente: Clarín