El negocio inmobiliario en la provincia está en franca caída y no se avizora en el corto plazo una recuperación de la actividad, que sigue el ritmo descendente de la economía del país. Las operaciones de compra y venta de inmuebles cayeron al final del primer semestre un 12% en comparación con el mismo período del año anterior, de acuerdo a un reciente informe del Centro de Investigaciones de Ciencias Económicas de Salta. Se pasó de 444 transacciones de propiedades a 390 en un año, según el estudio basado en datos del Colegio de Escribanos.

Si se compara entre junio y mayo pasados, el mercado disminuyó un 15% (67 operaciones menos) y en el transcurso de un mes se pasó de facturar $531 millones a $346 millones: una merma del 35%.

La incertidumbre generada por la inflación, la devaluación del peso frente al dólar y el alto interés de los créditos bancarios golpean al sector inmobiliario en todo el país. Hasta fines de mayo, cuando se inició la corrida cambiaria y la debacle económica, los empresarios del rubro, al menos los locales, venían con el envión de crecimiento que se registró en 2017 en la construcción y en las transacciones de propiedades. Después de ese mes todo colapsó.

Las operaciones con préstamos hipotecarios UVA (unidades de valor adquisitivo), que fueron un éxito el año pasado, cayeron un 70% en los últimos tiempos. Son estimaciones de la Cámara Inmobiliaria de Salta que dieron a conocer a El Tribuno la semana pasada.

"Todo lo que ha sido operaciones con crédito se ha logrado salvar una de cada cuatro. Primero porque cambiaron las condiciones de crédito y segundo porque hubo esa megadevaluación del 40%", dijo el titular de la entidad empresaria, Juan Martín Biella.

La caída en cantidad de escrituras desde mayo a la fecha va de la mano de una merma en la actividad de la construcción, tanto privada como pública. La edificación de viviendas sociales está prácticamente paralizada porque, según argumentan las constructoras y el Instituto Provincial de Vivienda (IPV), aún no se actualizaron los precios que paga Nación por metro cuadrado, que se mantienen a valores de abril de 2016.

En la parte privada la situación es igual a la estatal o peor. La crisis de los créditos hipotecarios impactó de lleno en el sector, que dejó varios desarrollos urbanísticos en suspenso.

La consecuencia de ese panorama fue la pérdida de tres mil puestos de trabajo durante el primer semestre, de acuerdo a la delegación salteña de la Uocra (Unión Obrera de la Construcción).

Desde el gremio detallaron que 1.800 obreros quedaron desempleados por la paralización de proyectos que coordina el IPV. Lo mismo ocurrió con más de 1.000 personas del sector privado.

El año pasado se registraron 4.954 operaciones de compra y venta de inmuebles en Salta, que significaron un crecimiento del 20 por ciento con respecto a 2016 y de un 4,5% si se las compara con 2015.

En el primer semestre de 2018, en tanto, con el impulso de los primeros cinco meses (después ocurrió lo ya descripto), hubo una suba del 4 por ciento en el volumen de transacción con respecto al mismo período de 2017 y un 17,19% si se compara con 2016.

Fuente: El Tribuno