Como intendente de Tartagal, Sergio Leavy fue elegido Diputado Nacional y pretendía seguir en ambos cargos. Finalmente dejó a su hermano en esa ciudad.
Este año, como Diputado, se presentó como candidato a Senador Nacional, resultando elegido en esa categoría el 11 de Agosto pasado, pero con la clara intención de no interesarle ese cargo, ya que su verdadera meta era ser candidato a Gobernador.
Ahora, como candidato a gobernador del Frente de Todos no acepta que nadie compita con él por el cargo de gobernador. Primero le denegó la posibilidad a Javier David, luego a Miguel Isa.
Todo a pesar que desde el Instituto Patria, oficina central del kirchnerismo a nivel nacional, le dijeron que acepte competir en internas con Isa, y con la posibilidad cierta que la Justicia actúe a tal efecto.
En ese sentido, quien recogió el guante y movió fichas inteligentemente fue el pre candidato a gobernador de otro frente, Gustavo Sáenz, quien ya sumó a Javier David a su espacio, y ahora lo invita al actual vicegobernador a competir dentro del mismo.
Todos tienen derecho a elegir y ser elegidos, eso es la democracia y el espíritu de las PASO. Lamentablemente hace unos meses proscribieron a @javierdavidok ahora pretenden hacerlo con @miguelisaok. Nuestro espacio político los invita a participar y que sea el pueblo quien elija!
— Gustavo Sáenz (@GustavoSaenzOK) 15 de agosto de 2019
La soberbia del "Oso" Leavy, quien debe estar convencido que los votos obtenidos el pasado domingo son propios, le están generando más enemigos que amigos. Lo mismo le ocurre en cada municipio, donde define candidaturas a dedo, y le cierra la posibilidad de competir a otros que se quieren sumar.
Creerse ganador de antemano, pensando que la gente lo votó a él y que no fue por estar colgado de la lista de Fernández - Fernández, puede costarle caro. Más aún cuando la elección provincial será diferente a la nacional y los salteños lo saben. La soberbia en política, es muy mala consejera, pero por ahora, eso parece no importarle al norteño.