El mapa de Argentina quedó “dividido” en dos tras las elecciones generales de este domingo 27 de octubre. Curiosamente una franja amarilla, color con el que se representa a Juntos por el Cambio, partido con el que el presidente Mauricio Macri buscaba la reelección, abarcó cinco provincias del centro del país.
En Mendoza, San Luis, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, Macri logró imponerse ante su principal opositor Alberto Fernández, quien ganó en el resto de las provincias del norte y sur del territorio argentino. Todas ellas quedaron pintadas de azul, color que representa el Frente de Todos.
Los resultados comenzaron a aparecer minutos después de las 21 e indicaron que en Luján, provincia de Mendoza, Mauricio Macri obtuvo el 42,96% contra el 35,35% de Alberto Fernández. En Pedernera, provincia de San Luis, la historia se repitió y el actual mandatario nacional conquistó al 40,53% del electorado contra el 36,99% del presidente electo.
Al igual que en las PASO, única provincia que lo eligió por la mayoría, Córdoba volvió a quedar pintada de amarilla. En gran parte de su territorio, uno de los más populosos de todo el país, Macri se quedó con el 48,18% contra 30,39% de Alberto Fernández.
En Santa Fe, los votantes de San Justo, Las Colonias, Castellanos, San Martín, Belgrano, Caseros y General López le dieron el triunfo a quien deberá abandonar la Presidencia de la Nación y dejar su cargo a Fernández.
Diamante, Entre Ríos también fue de las localidades que le dio su voto de confianza a Juntos por el Cambio, con el 42,91% de los votos contra 37,98% del Frente de Todos.