El juramento "hasta que la muerte nos separe" adquirió un nuevo sentido con el caso del joven japonés Akihiko Kondo, quien está casado desde hace poco más de un año con Hatsune Miku, un holograma de enormes ojos y pelo largo y celeste. Pero la vida de la esposa llegará a su fin en los próximos meses con una actualización de software que la matará.
La triste noticia fue dada a conocer en los últimos días. Kondo está destrozado por perder a su esposa holograma, con quien decidió casarse en 2018 en una ceremonia que le costó 18 mil dólares y con quien convivía a través de una GateBox, un dispositivo con un valor de casi 2.500 euros, en que aparece la mujer.
Miku lo despierta cada mañana, le desea un buen día cuando sale a trabajar y por la noche, cuando él le avisa por teléfono que volverá a su casa, ella prende las luces. Cuando es hora de acostarse, él se mete en la cama y ella reposa en un mueble junto a su marido, quien usa su alianza de bodas todos los días.
"Nunca la engañé, siempre pienso en ella todos los días”, aseguró el joven japonés.
El japonés de 35 años aseguró que su matrimonio fue completamente feliz hasta que la empresa Crypton Future Media, que desarrolló a Miku, le anunció que realizará una actualización completa para adaptar la programación del holograma a partir del 31 de mayo de 2020 y que eso implicará que su esposa desaparecerá.
Kondo explicó que la compañía le ofreció cambiar de pareja, con nuevos ajustes, pero aún está indeciso sobre si aceptar ese ofrecimiento, ya que tiene un gran apego sentimental por Miku: "Nunca la engañé, siempre pienso en ella todos los días”. "Estoy enamorado del concepto Hatsune Miku, pero me casé con el que tengo en casa”, agregó.