INSÓLITO

Fueron a bailar y terminaron teniendo sexo contra un árbol

Fueron a bailar y terminaron teniendo sexo contra un árbol

Los jóvenes fueron sorprendidos manteniendo relaciones sexuales en calle Leguizamón, entre Pueyrredón y Deán Funes. Ocurrió en la madrugada del domingo. “Nadie respeta nada, es un descontrol”, expresaron los vecinos.

En la madrugada del domingo, según informó Radio Vos, dos jóvenes, que aparentemente habían ido a bailar al corredor Balcarce, fueron sorprendidos manteniendo relaciones sexuales sin ningún tipo de pudor contra un árbol, ubicado en calle Leguizamón, entre Pueyrredón y Deán Funes.

El hecho fue advertido por varios testigos, entre ellos, un grupo de jóvenes, que desde el interior de su vehículo, decidieron inmortalizar en imágenes la situación, que no deja lugar a ningún tipo de suspicacia.   

Silvia, vecina del corredor Balcarce, ante los micrófonos de Radio Vos, consideró que la sociedad está descontrolada. “Los chicos viven sin frenos, es un desastre la situación, yo los he visto cortar botellas, agredirse y herirse”, opinó.

Otra mujer, quien también reside en inmediaciones a la zona, relató que los fines de semana se observan peleas tanto de hombres como de mujeres, autos rotos, corridas, y demás. “Nadie se pone las pilas, los vecinos no pueden hacer nada, en mi cuadra rompen las bolsas de basura, tiran botellas de cerveza, se escuchan gritos, corridas, y se ven muchas chicas borrachas, es un asco”, expresó.

Por su parte, Miguel Ángel Cruz, encargado de la plaza Güemes, en diálogo con Radio Vos, aseguró que “se ve de todo”, inclusive al mediodía, siendo los actores principales los chicos escolares. “Al otro día se encuentra de todo, profilácticos, ropa femenina, cartera, zapatos”, dijo.

Si bien el hecho generó una importante repercusión por tratarse de una zona muy conocida, cercana al corredor Balcarce, no es la primera vez que se observa este tipo de situaciones en la ciudad. Basta con recordar el reclamo de los vecinos del Hogar Escuela, quienes durante muchos años, debieron soportar escenas de sexo explícito en las veredas de sus casas.



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