Ayer, cerca de las 17 horas, se registró en Salta una leve precipitación de agua sobre la ciudad que hizo creer a muchos que llegaría la nieve. Lejos de la "belleza blanca", lo que se pudo observar fue una "rara" llovizna que dejó a cientos de autos completamente cubiertos de tierra.
"¿Qué es lo que llovió que mi auto quedó marrón?", se preguntaron algunos. Lo mismo ocurrió en terrazas y veredas donde cayeron las gotas desde el cielo.
La explicación que dieron avezados en el tema es que había polvo en suspensión, producto de la época de sequedad en el ambiente. El agua condensada que cayó se fue ensuciando en el aire y por ello se vio como una especie de barro.