La policía de Portugal, asistida por agentes alemanes y británicos, reanudó este martes la búsqueda de Madeleine McCann, la niña británica que desapareció en Algarve, una región turística del sur del país, hace 16 años.
Entre 20 y 30 policías, algunos de ellos uniformados, fueron vistos en la zona del embalse de Arade, a unos 50 kilómetros de Praia da Luz, el lugar donde la la niña, que entonces tenía tres años, fue vista con vida por última vez en 2007.
La policía portuguesa instaló una carpa azul y acordonó la zona. Testigos presenciales contaron que los agentes iniciaron la búsqueda poco antes de las 08:00 de la mañana en un área a unos kilómetros de la tienda. Pudo verse a más de una docena de autos y camionetas policiales llegando al lugar.
Las autoridades lusas explicaron en un comunicado el lunes que la búsqueda se reanudó a pedido de Alemania y con la colaboración de Gran Bretaña.
La fiscalía de Braunschweig, Alemania, indicó en un comunicado el martes que “se están llevando a cabo medidas procesales penales en Portugal como parte de la investigación del caso Madeleine McCann”.
“Las medidas se están aplicando a través de la asistencia jurídica mutua por parte de la fiscalía portuguesa con el apoyo de agentes de la Oficina Federal de la Policía Criminal”, agregó la nota.
Según el comunicado, las autoridades no están revelando “Información más detallada sobre los antecedentes (...) por razones tácticas de investigación”.
A mediados de 2020, la policía alemana identificó a Christian Brueckner, un alemán de 45 años que estuvo en Algarve en 2007, como sospechoso del caso. Brueckner ha negado cualquier implicación.
Brueckner está cumpliendo una pena de siete años de cárcel en Alemania por una violación que cometió en Portugal en 2005.
El sospechoso está bajo investigación por sospecha de asesinato en el caso McCann, pero no ha sido acusado. Pasó muchos años en Portugal, incluso en Praia da Luz en la época de la desaparición de Madeleine.
La desaparición de Madeleine despertó interés mundial durante años, con afirmaciones públicas de haberla visto en lugares tan lejanos como Australia, y ha generado gran cantidad de libros y documentales de televisión.
La recompensa por información que lleve a encontrar a Madeleine, que ahora tendría 20 años, alcanza ya varios millones de dólares.
Las policías británica, portuguesa y alemana siguen reconstruyendo lo sucedido cuando la niña desapareció de su cama en el centro turístico del sur de Portugal el 3 de mayo de 2007. Estaba en la misma habitación que su hermano y hermana gemelos de 2 años mientras sus padres cenaban con amigos en un restaurante cercano.