El efectivo policial que se desempeñaba como jefe de guardia de la subcomisaría de Los Pinares el pasado 24 de diciembre, día en que fue asesinada Liliana Flores por su expajera, también policía, fue imputado este jueves como autor del delito de violación de medio de prueba, registros o documentos. Acompañado de un abogado particular, decidió no prestar declaración.
El fiscal Gustavo Torres Rubelt formalizó este jueves la imputación contra el cabo de la Policía de la Provincia, Abel Córdoba, como autor del delito de violación de un medio de prueba, registros o documentos en perjuicio de la administración pública.
La acusación sobreviene a partir del resultado de la pericia documentológica realizada por el Departamento de Criminalística del Cuerpo de Investigaciones Fiscales a uno de los registros del libro de guardia de la Subcomisaría de barrio Los Pinares, secuestrado el 24 de diciembre pasado, tras el femicidio de Liliana del Valle Flores.
En el registro de las 6.40 del 24 de diciembre de 2019 del instrumento público, se pudo comprobar que hubo adulteraciones en relación a las directivas dadas inicialmente por la Fiscalía Penal de Cerrillos tras la denuncia realizada por la víctima durante la madrugada.