Sebastián Farfor, Sergio López  y Federico Gutiérrez son tres emprendedores sociales salteños que sin saberlo crearon la primera moto ambulancia de rescate animal gratuita en el mundo. Además de estar unidos por el amor a los animales, ahora están unidos por este maravilloso proyecto que, desde que se mostró, no deja de sorprender y gustar a un sin fin de personas.

El video que subieron a Facebook el sábado pasado hoy tiene más de 295 mil reproducciones y fue compartido por 12.019 personas. Los comentarios positivos y felicitaciones de la gente no tardaron en llegar pues la noticia llegó a medios nacionales e internacionales.

Entre risas y emoción, Sergio y Sebastián contaron a LA GACETA toda la historia detrás de esta iniciativa. Acompañados de su creación, la cual robó la mirada de personas que pasaban por el lugar, confesaron que jamás habían imaginado que llegaría a tener tanta repercusión.

“Nuestro corazón está puesto en la humanidad y en los seres vivos”

Hace dos meses, Sebastián se dirigía a rescatar a un callejerito en su moto cuando se quedó varado en medio de la lluvia. Ante la dificultad de conseguir movilidad, pensó en crear un dispositivo para solucionar este problema y llamó a su amigo Sergio quien, al instante,  se prendió a la loca idea.       

Los jóvenes contaron que a partir de ese día comenzaron a juntarse todos los sábados hasta llegar a lo que hoy es. Risueños, nunca dejaron de agradecer la solidaridad de la gente ya que se sintieron acompañados desde el principio cuando recibieron donaciones de los elementos para su creación.  

La moto ambulancia está destinada únicamente a la movilidad de perros y gatos de la calle, y mascotas en situación crítica. Sergio, el diseñador, contó que si bien cuenta con un sistema de seguridad, luces y sirenas opcionales, aún se encuentra en etapa de prototipo por lo que se puede mejorar: “fue tan el boom que no tuvimos tiempo de nada”, aclaró con buen ánimo.

Un sueño que aún está en camino

Si bien la moto ambulancia ya está creada, Sergio y Sebastián contaron que el proyecto no termina acá. Después de la fabricación, obtuvieron el permiso para circular permitiendo avanzar en materia de reglamentación por lo que solo queda cumplir la última etapa: la de la organización.

El escalón final del proyecto requiere la ayuda de conductores solidarios, que aunque por el momento estarán coordinados a través de WhatsApp, luego lo harán por una aplicación. Los mágicos emprendedores tienen el objetivo de que las personas puedan alertar con fotografías a los conductores, que estarán ubicados en los CIC de las distintas zonas de la ciudad.

“Esto está diseñado para toda la sociedad para que todos aportamos y ayudemos”, dijeron.

El sueño es hacer sostenible el proyecto, por lo que sostuvieron que no patentarán la idea ya que hacerlo sería un límite a aquellos que quieran copiarla: “Sería muy egoísta porque si pensamos en los animales, le estaríamos quitando la posibilidad de ser transportados”.

Por su parte, aseguraron que los materiales son simples favoreciendo a que su creación pueda ser realidad en cualquier parte del mundo. “Si esto es replicado nosotros mismos lo vamos a compartir y vamos a asesorar para que este adaptado a las normas”, aseguró Sergio.

Un amor revolucionario

Sebastián Farfor es un joven oriundo de Jujuy pero salteño de corazón que desde  hace tiempo utiliza su creatividad para ayudar a los que no tienen voz. El amor por lo animales nació en él desde pequeño y junto a su familia cuida de 28 animales, entre los cuales hay tres gansos rescatados, gallinas y perros.

Además de dedicarse a este emprendimiento y haber creado un comedor comunitario para perros, desde hace un año y medio capacita, diseña y rediseña carritos para perros con discapacidad. 

Su último paciente fue “Radamel”, un canino con el síndrome de nadador que no podía caminar pero que gracias a su solidaridad ahora puede hacerlo.

“Me encanta analizar un problema y decir: ¿Cómo buscamos la solución? Porque de eso se trata, ¿no?"

Sin dudas, estos tres jóvenes son un orgullo para muchos. De ahora en más, solo queda organizarse para que el dispositivo no muera. “Solo necesitamos el apoyo de la gente, que el que vea esto se involucre. Vamos por el buen camino”, concluyeron esperanzados.