Como un gesto a la CGT tras el paro del lunes 25, el Gobierno decidió reabrir la negociación salarial en el medio de la devaluación del peso y con la inflación por encima de los números previstos. Desde el ministerio de Trabajo buscarán que los sindicatos que habían firmado acuerdos por un 15% de aumento ejecuten la cláusula de revisión para incrementar hasta un 20% la negociación salarial.
Esta semana el ministerio encabezado por Jorge Triaca intentará avalar la aplicación de las cláusulas de revisión de los gremios que ya firmaron aumentos en un 15%. Muchas de ellas tienen ejecución en diferentes meses, por lo que buscan que ahora sea el momento de aplicación para evitar que se pierda más poder adquisitivo. "La idea es que vengan todos los del sector privado para activar los cinco puntos y llegar al 20%", aseguró a TN.com.ar una fuente de Trabajo.
La decisión oficial está en sintonía con el reclamo de uno de los miembros del triunvirato que comanda la CGT de reabrir los acuerdos firmados. Héctor Daer reclamó que se revisen las paritarias, tengan o no cláusula de actualización, vaticinó que habrá una "caída estrepitosa de la economía" y reclamó que el ajuste de gastos para reducir el déficit fiscal recaiga sobre "los sectores que más ganaron".
El dirigente habló de la necesidad de revisar todas los acuerdos colectivos, en un escenario económico marcado por la inflación y la suba del dólar. La moneda cerró la semana pasada cerca de los $ 30. "En las paritarias hay un desfasaje financiero. Todas tienen que ser revisadas, con cláusula o no", dijo el sindicalista. Además consideró que el Gobierno "se queda corto" si plantea una suba del 25% del salario mínimo.
El camino a hacia la mesa de negociación
Con el nuevo llamado, el oficialismo intentará desactivar futuras protestas de los sindicatos de la central obrera, cuando el contexto económico sea mucho más complejo debido a la intención de llevar el ajuste fiscal estipulado en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que prestó 50 mil millones de dólares para contener la crisis cambiaria.
En ese contexto, el dólar ejerce mucha más presión que antes. La última semana, a pesar de la intervención oficial, la moneda estadounidense llegó a tocar los 30 pesos. Y el traslado a precios en muchos sectores es inminente.
Además de la escalada del dólar, otra de las cifras que preocupa es la inflación. Sobre todo, después de que el INDEC diera a conocer los números de mayo, que fueron del 2,1%, y de que trascendieran las estimaciones de los aumentos de precio de junio. Se espera que el aumento generalizado de precios supere el 3%, de acuerdo a las consultoras privadas.
Fuente: TN