El ministro de Desarrollo, Daniel Arroyo, presentará este lunes en la provincia de Chaco el Plan Nacional “Argentina contra el Hambre”, que busca garantizar seguridad alimentaria y nutricional, dinamizar economías locales y potenciar propuestas productivas, publicó Clarín.
El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich y la vice Analía Rach Quiroga acompañarán al ministro Arroyo en el Centro de Convenciones Gala, en Resistencia, para presentar el plan nacional que “busca garantizar el derecho social a la seguridad alimentaria y nutricional y el acceso a la canasta básica de alimentos impulsando los proyectos productivos y las economías locales”, se informó.
Uno de los ejes centrales del programa es la implementación de la Tarjeta Alimentaria. Se trata de una asignación a madres y padres con hijos de hasta 6 años de edad que reciben la Asignación Universal por Hijo (AUH), embarazadas a partir de los tres meses que cobran la Asignación por Embarazo y personas con discapacidad que reciben la AUH un monto mensual fijo para comprar alimentos, excepto bebidas alcohólicas.
En declaraciones a la prensa, Arroyo explicó que estas tarjetas arrancaron en Concordia y la idea es “llegar a dos millones de chicos y un millón y medio de beneficiarios”, explicó el funcionario.
Gobernador de Chaco, Jorge Capitanich
Al referirse a la posibilidad de lograr desendeudar a las familias, aseguró que existe “una línea de créditos no bancarios del 2 y 3 % para comprar máquinas y herramientas”, que apunta a unas “cuatro millones de personas que trabajan y no pueden acceder a un sistema de crédito bancario con tasas muy altas”.
En cuanto al Consejo del hambre, dijo que están las entidades sociales, la producción, los movimientos sociales y del trabajo, y que tendrá “tres o cuatro reuniones al año con un observatorio en tiempo real, que irá marcando el funcionamiento de los planes”.
El gobierno provincial trabaja en un registro de productores locales a fin de conformar una red de comercialización local que garantice la demanda de la producción de las y los trabajadores de la economía popular y proteja el poder adquisitivo y la nutrición de los destinatarios, incentivando el consumo y desarrollo local.
Según se indicó, la economía popular, el cooperativismo y la agricultura familiar tendrán así un rol importante en el fortalecimiento de los mercados populares como espacios de comercialización con un precio justo, a partir del encuentro entre productores y consumidores.