La llegada de los fríos intensos obliga a abrigar cuerpos y ambientes. Cada uno lo hace según sus posibilidades y necesidades, pero en todos los casos es indispensable tener ciertos recaudos para evitar sobresaltos e incidentes, muchas veces con graves consecuencias personales y materiales.  

La Subsecretaría de Prevención y Emergencias, a cargo de Nicolás Kripper, insistió una vez más en una serie de medidas a tenerse en cuenta para llevar el riesgo a la mínima expresión. Son consejos útiles para recordar al momento de calefaccionar los hogares, para hacerlo de manera segura y evitar intoxicaciones con monóxido de carbono.

Ser precavidos en el momento de utilizar artefactos para la calefacción es una de las principales recomendaciones. Los elementos más empleados para esta época son las estufas eléctricas o a gas y braseros. El uso incorrecto de ellos puede ocasionar numerosos accidentes y dañar seriamente la salud de las personas.

“En el caso de una intoxicación con monóxido de carbono, es fundamental abandonar el lugar, respirar aire fresco, ventilar el espacio y recurrir en forma urgente a un hospital o centro de salud cercano”, recomendó Kripper.

Lo que se debe hacer

1. Ventilar la casa una vez al día, aunque haga frío.

2. Dejar siempre una puerta o una ventana  entreabierta.

3. Comprobar que los ambientes tengan ventilación hacia el exterior.

4. Encender y apagar los braseros y estufas a leña fuera de la casa.

5. No arrojar al fuego encendido dentro de la casa plásticos, gomas o metales porque desprenden vapores y gases que contaminan el aire.

6. Evitar mantener recipientes con agua sobre la estufa.

7. No utilizar el horno ni las hornallas de la cocina para calefaccionar el ambiente.

8. Controlar periódicamente, por un gasista matriculado, todas las instalaciones de gas de la vivienda.