La fiscal penal 1 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Ana Inés Salinas Odorisio, informó que en el marco de la investigación que lleva adelante por el homicidio calificado de María Leonor Gine, amplió la acusación para dos de los imputados por haber mediado violencia de género.
A partir de nuevos elementos valorados, tales como el testimonio de una de las hijas de la víctima, la fiscal infiere que María Leonor Gine, generaba maniobras de protección ante la inseguridad que la infundía la convivencia con el imputado Morales, que sumado a la características del inmueble, las condiciones de convivencia en el contexto de un aislamiento social obligatorio y la superioridad física de los imputados aprovechando la relación vincular, dejaba a la víctima en una posición de grave vulnerabilidad, circunstancias que habrían aprovechado tanto Morales como Detzel para ultimar a la víctima y luego apoderarse de su dinero.
En el decreto de ampliación se considera además que el Protocolo para la Investigación y Litigio de Causas de Muerte Violenta de Mujeres, define “la muerte violenta de mujeres por razones de género, ya sea que tenga lugar dentro de la familia, unidad doméstica o en cualquier otra relación interpersonal; en la comunidad, por parte de cualquier persona, o que sea perpetrada o tolerada por el Estado y sus agentes, por acción u omisión”.
Entonces, el homicidio en sí, fue una clara manifestación de violencia de Morales, Aguirre y Detzel, produciendo la muerte de María Leonor Gine. Agresión que realizan Morales y Detzel en un contexto de dominación, con control general coercitivo por pertenecer al género opuesto.
Agustín Morales se encuentra imputado como autor de los delitos de homicidio agravado por el vínculo, ensañamiento, alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género en concurso real con la violación de las medidas dispuestas por autoridad competente para impedir la propagación de una pandemia.
Federico Leonardo Detzel, en tanto, se encuentra acusado como autor de los delitos de homicidio agravado por ensañamiento, alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género en concurso real con la violación de las medidas dispuestas por autoridad competente para impedir la propagación de una pandemia.
Los dos imputados fueron asistidos por sus abogados y tras conocer la nueva acusación en su contra, decidieron no prestar declaración.