Por lo general reciben un llamado telefónico, del otro lado un hábil orador abre un diálogo a menos intentando ganar rápidamente la confianza de su víctima. Pasar por algún familiar o conocido es el objetivo del delincuente a través de la metodología conocida como "el cuento del tío". El miércoles al mediodía César, un hombre de 72 años, cayó engañado y denunció la sustracción de unos 90.000 pesos.
El flamante jubilado se disponía a comer algo para luego ir a descansar cuando el fuerte timbre del teléfono irrumpió aquel mediodía. El denunciante señaló que el ladrón se presentó como su "tío", en esos primeros segundos César no brindó ningún tipo de información al respecto, cierta desconfianza hacía suponer que algo no estaba bien.
El supuesto "tío" le solicitaba a César, el damnificado, que se fijara la cantidad de billetes en dólares que debía tener en un sobre y le dijera cuántos tenía, además de pasarle el número de serie. El motivo expuesto por el delincuente era para "blanquear en la AFIP" dicho monto de dinero. La víctima le dijo que tenía 48 billetes de 100 dólares y una suma en pesos argentinos de 60.000.
El falso pariente le comunicó al abuelo que una persona pasaría por la vivienda, en la avenida Costanera al 200, Villa San José, para retirar el dinero y luego pasarle los datos y de esa forma poder llevar adelante el blanqueo de los billetes en la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Al cabo de unos minutos se hizo presente el sujeto enviado por el falso tío quien volvió a llamar al abuelo para decirle que no tuviera miedo y dejara pasar al joven.
Sin mostrar ninguna credencial ni identificación, el sujeto ingresó a la casa, César denunció que lo hizo pasar hasta su habitación y en la cama contó los billetes en presencia del estafador. Le pidió que anotara el número de los billetes, cuando el damnificado fue a buscar una lapicera el hombre salió corriendo con el dinero, saltó la tapia y se dio a la fuga. La víctima sostuvo que abordó un auto negro pero no recordó la marca. Los investigadores intentan rastrear a los estafadores.
El "cuento del tío" es un tipo de estafa donde los delincuentes se aprovechan de sus víctimas, suelen ser adultos mayores los blancos de esta modalidad. En algunos casos los estafadores se encargan de hacer un seguimiento de quienes serán sus damnificados, en otros solo consiguen un dato clave, como nombre de algún pariente cercano, para llevar a cabo su plan.