El viernes alrededor de las nueve, la comunidad rosarina se vio consternada por un suceso en los cajeros del Banco Macro cuando Mario Olima, un reconocido periodista, notero de la radio San Martín, protagonizó una discusión con Camila Melián, joven policía del 911. A raíz de la discusión, personal policial llevó a Olima en calidad de demorado a la comisaría, donde se descompuso y terminó en el hospital. Mientras tanto, la noticia se hizo viral al instante, ya que muchos trabajadores de medios se hicieron presentes en el banco en apoyo al notero. Por otro lado, la policía aseguró a El Tribuno que alrededor de diez personas la insultaron en las redes sociales sin siquiera conocerla.
Una vez que Mario Olima se recuperó del episodio relató a El Tribuno lo que le tocó vivir. "Ese día estaba trabajando como lo hago siempre", relató.
Además de ser notero, vende maicenas y bingos desde hace veinte años en las afueras del banco. Motivo por el cual, siempre ayuda a personas de la tercera edad a manejar los cajeros automáticos.
"Hace veinte años que trabajo, a pesar que tengo artrosis en manos, cadera y hombros. Soy diabético e hipertenso. Como no tengo un trabajo fijo, me las rebusco.
Luego contó: "Cuando llegué esa mañana, tuve un entredicho con la policía Camila Melián, que me impedía ingresar a los cajeros cuando yo le estaba ayudando a una señora que me pidió auxilio. Fue solo eso".
"Mayormente esta atención se la brindo a las personas mayores que no saben usar un cajero", agregó.
"Después de la orden de Melián entró otro policía y sin ninguna identificación y me dijo lo mismo, que salga de ahí, siendo que la señora me había pedido ayuda", relató desconcertado.
"Cuando salí, el policía me dijo que no podía entrar, le dije que no había problema y en eso Melián me acusó de ladrón y me dijo que yo le robaba la plata a los viejitos. Me sentí muy mal que me diga así y le contesté que me denunciara si era así y que me ponía a disposición de la justicia. Ella siguió con los agravios y me contestó que yo no era nadie".
"No me jodás porque te voy a poner los ganchos y te llevo a la comisaría", relató que le dijo la uniformada a modo de amenaza.
"Yo soy la policía, soy la ley y vos no sos nadie", me seguía diciendo.
"Después ella llamó a la central mientras me amenazaba con patearme la cabeza y me iba a encerrar en el 911. Al rato llegaron más efectivos del 911, y casi al mismo tiempo llegaron mis colegas de la radio y de la televisión apenas se enteraron del problema", explicó el trabajador.
Versión azul
Luego del gran despliegue mediático Camila Melián (24), relató su versión. "Me designaron a los cajeros ese día desde las seis de la mañana, como es habitual. A las 9.30 llegó este señor, y ese día había mucha gente en las colas porque en los cajeros no había plata", recordó. "Este señor se metió a los cajeros, empezó a revisar uno por uno, no entendía que hacía ahí. Mi compañero se acercó y le pidió que se retire. Luego nos dijo que no sabía cuál era nuestra función", relató la policía.
“En minutos llegó Hansen (periodista en Cablevisión), Lili Núñez (periodista de radio San Martín), todos ahí filmando, no podía creer el alboroto que hacía este hombre”, señaló, por Olima. “Me dijo, ‘dejá que yo me voy a la comisaría con Hansen, él me va a llevar’, le contesté que no podía irse con Hansen a ningún lado porque estaba demorado y sostenía que yo lo había llamado ladrón, cosa que no era cierto.
"Parece que no le gustó lo que le pedimos y nos empezó decir que nosotros estábamos locos, y vos quién sos, qué te metés, seguro que no tenés ni dos años acá", manifestó Melián. Me contestó que iba a llamar a Leiva y a Cejas (jefes), le contesté que llame a quién él crea.
"Agarró su teléfono, lo llamó a Leiva y le decía que tome medidas conmigo porque yo quería arruinar su trabajo. Yo solamente lo escuchaba, y no entendíamos por qué hacía tanto escándalo, ante un simple pedido de salir afuera".
Denuncia por violencia de género y amenazas
La policía Melián, además, manifestó que denunció a Olima por resistencia a la autoridad y por violencia de género. “Se refería a mi como si yo fuese inferior, que no tenía ni dos años de experiencia. También lo denuncié por amenazas porque me echaba la culpa de lo que estaba pasando y que me haría correr del trabajo. Que ya pronto iba a saber quién era él”.
“Me causó mucho mal todo esto, gente que no conozco me escrachó por todos lados, y por Facebook me amenazaron: ‘ojalá te muerás, ojalá te pase todo lo peor’. Me causó un gran malestar y lo estoy tratando con mi psicólogo, a pesar que me dijeron que no le lleve el apunte a esto, pero no es tan sencillo, no es fácil entrar a Facebook y que todo el mundo te diga cosas feas. Hasta subieron una foto mía, un masculino que no conozco, exigiendo que pida disculpas por el daño que yo había causado”.
“Saqué capturas de todo porque nadie tiene derecho a amenazar ni compartir mi foto privada, también hice la denuncia a este señor porque no hay derecho de hacer eso”, expresó.
Por otro lado, la policía manifestó que tuvo el apoyo de sus compañeros. “Mi jefe se hizo presente, pero el hombre hizo un escándalo, alteró a toda la gente que estaba en la fila. Todo un teatro. No me parece que porque uno sea mujer no te respeten, jamás he sido atrevida con nadie, por lo pronto este hombre no se puede acercar a mí ni hablar de mí, eso lo dispuso el fiscal”, concluyó.