El intendente de Aguaray, Jorge Prado, será imputado hoy por la Justicia Federal en la causa contra el fraude millonario en perjuicio del Estado nacional por el robo de los caños del gasoducto del NEA. El Tribuno pudo confirmar que también se acusará a Diego Andrés Alos, dueño de la empresa mendocina OSIP SA.

Prado autorizó a fines de 2019 a esa compañía a remover los caños de la millonaria obra y sacarlos de la provincia bajo el rótulo de material en desuso contaminante. De esa forma, pudo pasar controles policiales y de Gendarmería en distintos viajes. En el fuero federal también se formalizará la investigación contra otras dos personas, cuyos nombres no trascendieron hasta el cierre de esta edición.

El martes pasado, Gendarmería allanó la sede municipal en la búsqueda de la documentación con la que el actual intendente de Aguaray autorizó a la empresa mendocina a sacar los caños. El robo de esa red se hizo en varios puntos del norte provincial. Los caños terminaron en el mercado negro como comederos de vacas y para otros usos rurales, con una comercialización a precios bajísimos.

   El intendente Prado, complicado
 

El caso, por cierto, generó chispazos dentro de la Justicia Federal, ya que el juez federal de Orán, Gustavo Montoya, objetó el desempeño del fiscal José Luis Bruno, ya que en tres meses no se imputó ni se detuvo a nadie. En Salvador Mazza, en tanto, el fiscal provincial Armando Cazón logró avances importantes en la causa. El jueves pasado, el juez de Tartagal, Fernando Mariscal Astigueta, accedió al pedido de Cazón y se declaró incompetente en la causa. Ahora el juez federal Carlos Martínez Frugoni deberá resolver si atiende el caso, que le llegará con un detenido, un camión y 77 caños secuestrados.

Con la imputación del intendente de Aguaray crecerá el escándalo político. El jefe comunal intentó despegarse durante estos meses del hecho que investiga la Justicia. El tema generó repercusión en todo el país. 

En el paraje El Desemboque, el 13 de noviembre de 2019, efectivos policiales de Alto La Sierra vieron un camión cargado con 14 caños del Gasoducto del NEA y observaron en un camino vecinal otra gran cantidad de tubos acopiados para su transporte. El chofer, de Salvador Mazza, quedó detenido y el equipo fue secuestrado junto a 77 caños de 24 pulgadas. Un día después Cazón tomó declaración al chofer, Miguel Ángel Cuéllar, en audiencia de imputación por robo calificado.

El 6 de diciembre el detenido de Salvador Mazza, luego liberado, amplió su declaración y admitió que había sido contratado para el flete por Dante Rodríguez, quien fue detenido el 6 de mayo.