Matías Paz, acompañado de su abogado, Santiago Pedroza, fue imputado por tentativa de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego, lesiones leves y tenencia, portación de arma de guerra y daños en concurso real, tras el ataque a tiros dentro del bar Temple el domingo 22 de octubre. Tras escuchar la acusación se abstuvo de declarar, según publicó Informate Salta.

El fiscal penal Ramiro Ramos Ossorio fue quien llevó a cabo la imputación donde además pidió la prisión preventiva.

Tras su detención el pasado viernes, durante el fin de semana personal de la Unidad Especial de Investigación Especial del CIF localizó en una vivienda de barrio Hernando de Lerma de la ciudad de Salta, el auto en el que el acusado se dio a la fuga del lugar del hecho y se procedió a su secuestro.

En la madrugada del 22 de octubre Paz ingresó al bar ubicado en el Paseo Güemes donde discutió con los empleados, quienes se negaron a venderle alcohol, el hombre se fue y regresó a los pocos minutos y realizó tres disparos hacia los empleados y huyó. Milagrosamente no hubo heridos.

Después de cinco días de búsqueda lograron detenerlo en una casa del barrio Costa Azul, donde ya no prestó ninguna resistencia. Desde ese día se encuentra detenido en la Alcaidía General.