Ayer, Julia Leal, ingresó al hospital San Bernardo con nuevas heridas. La testigo, que aseguró haber estado cautiva junto a la diseñadora María Cash en una casa de Campo Quijano en 2013, y acusó a su exmarido y otros cuatro miembros del Servicio Penitenciario Federal de integrar una red de trata, volvió a denunciar torturas.
La mujer ingresó al hospital San Bernardo de Salta con un mensaje mafioso marcado en la espalda con un cuchillo, comunicaron desde página "Todos por Julia". Hace un año exactamente, había sufrido un ataque similar justo después de declarar en contra de los policías, a quienes vinculó con el secuestro y muerte de la joven desaparecida.
En esa oportunidad dos desconocidos la ahorcaron, la drogaron con cápsulas y le marcaron con un cuchillo en el abdomen la frase: "El macho siempre gana". Pese al hermetismo que rodea la investigación, la vinculación de los dos hechos resulta natural y preocupante.
En su declaración, Leal dijo que estuvo "presa" en su propia casa de la ciudad de Campo Quijano hasta octubre de 2013, cuando la rescataron de la situación de esclavitud y cautiverio a la que la tenía sometida su propio esposo.
La mujer manifestó que tanto él como otros miembros de la fuerza traían mujeres a ese lugar y las tenían encerradas y drogadas, para prostituirlas. Ese habría sido el contexto en el que coincidió con María Cash, a quien aseguró haber visto viva pero que no la llamaban por su nombre sino que le decían "Paola", indica TN.
Desde que se animó a denunciarlo, las amenazas se volvieron algo habitual. "Cuando finalmente decidí hablar de todo y para todos, apenas llegué a Salta me destrozaron a golpes y me amenazaron de muerte. Eso les demuestra que no vine a mentir sino a decir la parte de la verdad que callé", remarcó a los medios, y afirmó que no va a "callar más aunque me juzguen como quieran, porque mi silencio me traicionó".
Según un grupo de Facebook que se armó en su defensa, Mesa nacional por Julio Leal, Leal no ve a sus hijos desde hace un tiempo: “Julia Leal, sobreviviente de una red de Trata en Salta, busca a sus hijes que fueron llevados por su ex pareja e integrante de dicha red. Se desconoce el paradero de les niñes”, dicen los mensajes escritos en marzo pasado.