Después de la incursión de sicarios para la ejecución de dos jóvenes en una senda fronteriza con la República de Bolivia, ayer se conocieron hechos relacionados con secuestros denunciados tanto en Salvador Mazza como en Orán. En los tres casos conocidos por denuncias formales, la intención de los captores no fue causar daños a las víctimas, sino mostrar, al parecer, la capacidad que tienen ciertos grupos para operar con impunidad. El doble crimen de Reynaldo Gareca y Janet Ramos provocó una sensación de inseguridad y a la vez cubrió de impunidad superlativa a los sicarios que ingresaron a nuestro país para hacer cumplir sus "leyes", las de los cárteles de la droga.
Esta sensación de desprotección pública se vio reflejada por una noticia que causó pánico y estupor en la mañana de ayer. Una estudiante de 15 años, según su testimonio y el de sus padres, fue levantada desde el centro mismo de Salvador Mazza para terminar en un desolado paraje cercano a Campo Durán, sobre ruta 54.
La denuncia radicada confirmó que la chica fue interceptada por desconocidos cuando se dirigía a un establecimiento educativo de la localidad fronteriza. Se rubricó en la Comisaría 40, donde se realizó la denuncia, que a la jovencita la durmieron en el vehículo y cuando se despertó sus captores la liberaron en un lugar desolado. Describió a una Trafic blanca.
La senda de la muerte, donde ejecutaron a la pareja. Agencia
La denuncia dice que la estudiante fue abordada por extraños cuando estaba a media cuadra de su colegio y que fue drogada. Todo sucedió alrededor de las 7.30 de ayer
Un medio radial de la zona entrevistó al padre de la adolescente, quien dijo: "Le colocaron un trapo en la cara, la subieron a una Trafic blanca y pasaron el control de Arenales, cerca del río Caraparí", relató el hombre. La chica fue examinada por médicos legales y al parecer no tenía lesiones.
A esta denuncia se sumó otra en el paraje La Pista, también en Salvador Maza, donde un menor alertó que intentaron secuestrarlo. Dijo que los sospechosos se movilizaban en un vehículo ocupado por una pareja que simulaban ser efectivos de la Federal.
A estas denuncias formales se agregó un caso más claro aún. Ocurrió el fin de semana último en Orán, en el paraje Campo Chico, donde un motociclista mantuvo secuestrada por unas horas a una niña de 8 años. De acuerdo con los datos aportados por amiguitos de la menor, el motociclista huyó por calle Diego Calvisi. Luego de ser liberada, la niña relató que el sujeto la llevó con engaños a un cañaveral y que la abandonó en medio de la oscuridad. El padre de la nena la encontró cuando seguía el rastro del captor. Al parecer, el individuo advirtió que el hombre estaba tras sus pasos y por eso la liberó.
Una fuente señaló ayer a El Tribuno que el clima está enrarecido en toda la frontera norte por rumores de toda naturaleza, luego de los sangrientos episodios de los últimos días. En medio de esta disputa de poder, la cantidad de cocaína que es incautada de forma diaria está mostrando a las claras que las vías terrestres son el único medio que tienen los carteles para llegar a los puertos de embarque.
En la frontera con Bolivia están todas las fuerzas de seguridad nacionales, pero en los últimos tiempos se sumó también la Policía de Salta para marcar territorio, con el propósito de sumar su aporte en esta lucha. Por ese motivo, desde hace unos meses todas las fuerzas están participando en los operativos antidrogas. Sin embargo, los crímenes violentos continúan sin solución de continuidad..
"Hoy en la frontera los crímenes están relacionados con el narcotráfico. De allí se derivan los ajustes de cuentas y las mejicaneadas", dijo un informante. En tal sentido, puso como ejemplo lo que pasó el domingo con la ejecución de una parejita en Salvador Maza.
Las desmentidas de la policía
El viernes 18 de mayo la policía de Salta, a través de su oficina de prensa, comunicó a la ciudadanía que “los indicios obtenidos por los investigadores indican que el hecho relatado por un adolescente en torno a un secuestro no sería real.
El comunicado informa y asegura que los investigadores del Sector 43 trabajaron para determinar la veracidad de un supuesto secuestro que fue reportado el miércoles 16.
Conforme a los que se supo, un adolescente habría sido abordado por dos automovilistas en inmediaciones de calles San Martín y Belgrano cerca de las 13, en la localidad de Salvador Mazza.
Luego pasar por controles en ruta, logró escapar junto a un niño que al parecer habría sufrido idéntico hecho.
Ese era el relato de la supuesta víctima de entonces.
Relato o queja que fue desestimada por una supuesta investigación de la Policía provincial que dijo que las distintas técnicas investigativas dejaron entrever que el episodio no guarda relación con las declaraciones de ocasionales testigos, ni del mismo damnificado en base a una serie de inconsistencias en el relato.
Esta vez, en un horario de mucha afluencia de gente o testigos, una adolescente denuncia un secuestro.
Ayer la menor apareció ilesa a muchos kilómetros del lugar de la coptación.
Es evidente que los secuestradores a una jovencita de 15 años no le quisieron causar daño y eso debe tener explicaciones.
Fuente: El Tribuno