Doña Palmita Atanasia Suárez (74) murió hace pocos días. No fue por una enfermedad ni mucho menos, sino que fue víctima de la violencia de su propio hijo (adoptado). El joven, identificado como Marcelo Fernando Paz (25), la tiró a un canal luego de reclamarle que le diera dinero. La mujer se ahogó.
La mujer -en compañía de su hijo- debía cobrar su jubilación y la pensión derivada de su extinto esposo. Alrededor de las seis de la mañana comenzaron a caminar hacia la parada del colectivo, en el ingreso al puente del dique Los Quiroga, en Santiago del Estero. En el trayecto de 400 metros, el joven le había pedido plata para que hiciera arreglar la motocicleta de 110cc. La mujer se los negó y le dio sus fundamentos.
De acuerdo con las investigaciones policiales, al parecer, mediante engaños, el joven la llevó hasta cerca del canal revestido, donde le propinó un golpe de puño en el ojo y la arrojó -aún viva- a las aguas del curso artificial, que llevaba un abundante caudal.
Personal de la División Homicidios Banda encaminó la investigación en el domicilio de la víctima, donde se encontraba Paz. El joven tenía la billetera de su madre, aunque no había extraído el dinero de su jubilación. Abrumado por la situación, habría confesado el homicidio de quien lo había adoptado y contó cómo sucedieron los hechos.
Marcelo Paz, el joven acusado de golpear y arrojar a su madre al canal, de donde iba a ser difícil que saliera con vida, será sometido a pericias psicológicas y psiquiátricas para establecer su estado de salud mental.
No era la primera vez que golpeaba a doña Palmita Suárez. En 2014, Paz estuvo detenido por una denuncia de la mujer. El joven había golpeado a sus padres y provocado cuantiosos daños en los bienes de la casa. Posteriormente, fue excarcelado.