Una joven chofer del corredor 7 de la empresa permisionaria de Saeta, Alto Molino, fue brutalmente agredida por un pasajero del interno que conducía en una situación aún no esclarecida por completo.
María Aquino, la chofer golpeada.
La cobarde agresión física de un hombre mayor de edad en contra de una mujer chofer se produjo con el coche detenido, abajo del mismo sobre la banquina o espacio verde, donde el agresor había caído pesadamente desde la unidad del transporte público de pasajeros, cuando supuestamente se disponía a descender.
Algunos testigos presenciales e incluso la hermana de la mujer agredida coincidieron que los golpes que enviaron a la chofer a la clínica Cenesa los recibió abajo de la unidad después de soportar la violencia verbal del sujeto, ofuscado por el cobro del boleto que no había abonado a través del sistema de tarjeta magnética.
La agresividad del pasajero produjo lesiones en el rostro y luxación de uno de los hombros a María Aquino, pero solo gracias a la intervención de otros pasajeros la brutalidad del irascible sujeto no llegó al extremo.
Dos versiones circularon anoche sobre el suceso, pero finalmente todas coincidieron en que la causa primigenia fue el cobro del boleto.
Así explicó en parte el incidente la hermana de Aquino, Agustina, quien dijo que el sujeto ascendió a la unidad pero no abonó el pasaje. Al ser observada su picardía la chofer lo invitó a pasar el boleto y allí el sujeto que se hallaba fuera de sí, drogado o alcoholizado, comenzó a insultar a la mujer chofer. Finalmente, el irascible pasajero abonó el pasaje pero comenzó allí, envalentonado por el pago, a excederse verbalmente. "La trató de gorda puta como mínimo", dijo su hermana.
La violencia verbal acompañó cada metro del recorrido hasta que en cercanía del barrio El Círculo el sujeto accionó el timbre para descender.
Allí hay versiones que indican que la chofer no paró cuando debía hacerlo, otras dicen que hizo lo correcto. Lo cierto es que cuando el sujeto descendió el coche se puso en movimiento derribando al pasajero.
En ese punto la hermana de la colectivera dijo anoche a El Tribuno: "Los pasajeros gritaron que se tiró, se tiró y entonces mi hermana decidió detener la unidad y bajar para auxiliar al sujeto y éste aprovechó la ocasión para golpearla salvajemente".
Agustina Aquino luego agregó: "A la clínica llegaron varios pasajeros a dar su testimonio y a apoyar a mi hermana, además de gente del gremio. A mi hermana María le dieron varios golpes en el rostro y le dislocaron el hombro, la agresión fue brutal, no tiene palabras".
Luego aclaró: "Si los pasajeros y las mujeres que viajaban allí no detienen al sujeto éste seguramente la hubiera matado a golpes".
El agresor
Lo cierto es que el agresor también recibió lo suyo de parte de un nutrido grupo de pasajeros hasta la llegada de la policía que lo llevó detenido.
La denuncia de la chofer no se hizo esperar pero hasta las últimas horas de la noche de ayer la carátula del episodio no tenía aún sustento, ya que varias de las testimoniales sobre el incidente quedaron para las primeras horas de hoy.
Parte médico
Familiares de la joven chofer aseguraron anoche que la misma se encuentra lúcida pero muy dolorida.
"Le hicieron una tomografía y varios estudios complementarios, no está en condiciones de dar notas", dijeron.
En tanto la noticia puso de nuevo en debate el tema de la seguridad arriba y abajo del transporte público de pasajeros, cuyo boleto se incrementa al son de la inflación y el impacto sobre los usuarios cada día se siente con más fuerza.
En ese contexto, el secretario general de la UTA (Unión Tranviarios Automotor), el gremio que agrupa a los choferes, Jorge Flores, dijo anoche a El Tribuno que la noticia de una nueva agresión en contra del personal de Saeta lo movilizó hasta la clínica Cenesa.
El dirigente sindical dijo: "Vinimos a interiorizarnos sobre la cuestión y a brindarle apoyo a nuestra afiliada".
"Por el momento, estamos recabando la información técnica sobre el asunto y el estado de salud de María Aquino. Ella está dentro de todo lo grave bien, muy golpeada", agregó.
"Lamentablemente este es uno de los tantos incidentes que sufren los choferes y que venimos reclamando a la seguridad de la provincia. Pudo haber sido más grave pero igualmente es un llamado más de atención", dijo el dirigente.
"Mañana (por hoy) a primera hora se van a reunir los compañeros y estamos citando a todos los delegados a la sede de la UTA, donde trataremos el asunto y también el tenor de la queja que elevaremos al Estado provincial", consideró.
Al ser requerido si por este caso podrían llegar a decretar un paro del transporte urbano de pasajeros, el sindicalista señaló: "Vamos a conversar a fondo en el plenario y las medidas que tomemos saldrán de los afiliados al gremio, pero no descarto que se pudieran tomar medidas extremas en su momento".
En tanto, algunas voces se refirieron a la belicosidad del sujeto que incluso rompió el celular de un pasajero que intentaba grabar la violencia verbal del hombre durante el accidentado viaje urbano hacia el este de la capital.
Fuente: El Tribuno