La niña fue atacada por un perro propiedad de un vecino. A causa de la gravedad de las heridas fue trasladada de urgencia al Hospital Materno Infantil, donde ingresó directamente al quirófano. Por tal motivo, el fiscal penal de Cerrillos, Federico Portal, imputó de manera provisional por la presunta comisión de delito de lesiones culposas graves, a un hombre de 28 años, propietario del animal.

El hecho ocurrió la semana pasada, en una vivienda ubicada en calle 12 de Octubre, del barrio San José, cuando el perro del acusado ingresó al jardín de un vecino y atacó a una menor, que en ese momento estaba jugando.

De acuerdo al informe médico legal, la paciente presentaba “herida suturada en mejilla, pómulo y comisura labial izquierda, hematoma en párpado inferior de ojo izquierdo. Según historia clínica, paciente cursa postoperatorio de lesión grave de parótida y fístula mucocutánea. Lesiones por mordedura de can, curable en el término de 30 días”.

El médico corroboró “lesión grave de parótida y fístula mucocutánea”, con cirugía, advirtiéndose la deformación permanente del rostro, sugiriendo cirugía estética e intervención psicológica.

Por su parte, el fiscal ordenó inmediatamente el secuestro del animal y la correspondiente observación e informe por parte de un veterinario.

En los fundamentos de la imputación el fiscal Portal expresa que con su accionar, el propietario no tomó los debidos recaudos a fin de resguardar a su perro para que permaneciera en su domicilio y, negligentemente, dejó que el animal saliera. La audiencia de imputación fue fijada para la semana próxima.

A fines del mes pasado, dos jóvenes fueron ferozmente atacados por dos perros raza pitbull, que le produjeron a uno de ellos heridas de gravedad. El hecho ocurrió en barrio Los Paraísos, de Cerrillos.

Una de las personas agredidas terminó gravemente lesionado y hospitalizado. Las víctimas fueron sorprendidas por los canes que se hallaban en la calle, sin ningún tipo de cuidado por parte del propietario de los mismos.

Uno de los jóvenes tuvo que treparse a una pared para evitar la furia criminal de los perros, herido ya en los brazos, las manos y la cabeza.

La víctima fue derivada al centro de salud de barrio Pinares y luego al hospital San Bernardo por la gravedad de las lesiones en sus miembros superiores.