Estando detenido el imputado solicitó la Suspensión del Proceso a Prueba
El hombre, identificado como E. Munizaga, ex alumno de la Esc. Técnica Einstein, quien fue detenido en el marco de una investigación de la Fiscalía especializada en Robos y Hurtos (UNICROH) por la adulteración de medidores de EDESA, fue condenado por la justicia y deberá realizar tareas comunitarias en un hogar de ancianos dos veces por semana durante doce meses, someterse a reglas de conducta y presentarse periódicamente ante la Secretaría de Control de Juicio a Prueba.
Además deberá reparar económicamente a la empresa por el daño causado. En caso de que no cumpla con las medidas dispuestas, podría ser llevado a juicio donde enfrentaría una pena de hasta 6 años de prisión, por el delito de Robo de Energía Eléctrica.
No es el primer caso
El año pasado, una mujer debió hacer trabajo comunitario y pagar más de $100.000 por colgarse de la luz.
Se trató de un comercio en Villa Chartas, cuya dueña se había colgado de la luz. Fue imputada por una Fiscalía por el delito de defraudación, ya que colgarse de la luz o adulterar medidores es considerado delito por la ley penal.
La mujer, de iniciales "E.R.", fue descubierta por los inspectores de EDESA, y por ello fue denunciada penalmente y llevada ante la Justicia. Para evitar ir a juicio, debió pedir la suspensión del juicio a prueba. El Juzgado de Garantías N° 1 le concedió la suspensión, pero debió pagar la suma $104.000, hacer trabajo comunitario, someterse a reglas de conducta, y presentarse periódicamente ante la Secretaría de Suspensión de Juicio a Prueba. Si incumpliera alguna de las consignas se le podría revocar el beneficio y podría terminar yendo a juicio oral y público.
Lo mismo ocurrió con un vecino de la localidad de Las Lajitas que por colgarse de la luz, además de tener que pagar lo adeudado a EDESA y la multa por el fraude, debió someterse a las reglas de conducta impuestas por el Juzgado de Garantías de J.V. González y hacer donaciones mensuales al Hospital local.