En Metán los vecinos todavía no salen de su asombro, en plena madrugada, se despertaron con sirenas que pululaban y advertían que algo grave estaba sucediendo, por eso muchos de ellos celular en mano grabaron una persecución de película.

Todo se inició a las 2.09 de la mañana cuando el conductor de una camioneta Volkswagen Amarok de color negro realizó maniobras peligrosas en las que chocó a varios vehículos que se encontraban estacionados en la calle de la ciudad. 

Al advertir la situación por los llamados de los vecinos, la Policía salió en búsqueda del iracundo conductor que lejos de mermar la marcha y bajar la velocidad, ante la presencia policial, intentó escapar de los patrulleros. La persecución duró 43 minutos, desde las 2.09 hasta las 2.52 que fue cuando los oficiales pudieron detener al conductor con la camioneta. “Fue de película, no podía creer lo que veían mis ojos por eso saqué mi celular y comencé a grabar todo. El tipo estaba como loco, cruzaba las esquinas a toda velocidad, la policía inclusive le hizo disparos al aire para disuadir su actitud y que detenga su marcha, pero lejos de hacerlo continuó escapando”, le dijo a El Tribuno uno los vecinos que filmó la persecución policial.

Finalmente fue detenido a 10 kilómetros en la Ruta Nacional 9-34. El hombre se negó a realizarse el dosaje de sangre, pero el test de alcoholemia le dio 1.30 gramos de alcohol en sangres, es decir conducía totalmente borracho.

El juez que intervino en la causa pidió que el iracundo conductor sea identificado, se le labren las actas de infracción al DNU que habla de no circular de 0 a 6 de la mañana, además de las otras transgresiones. “El hombre no quedó detenido por orden del juez interviniente pero la causa continuará su marcha. Deberá responder a los daños que ocasionó además de haber quebrantado la ley”, señalaron desde la Policía metanense.

Ahora Oscar Gustavo Arana, de 47 años, tendrá que responder además a los daños ocasionaados a varios móviles policiales por daños calificado, resistencai y atentando a la autoridad y violación al DNU Covid-19.