La gira por Europa sirvió para definir el futuro económico y político del país. Después de que Alberto Fernández se reuniera con los principales líderes del viejo continente, anunció que enviará un proyecto de ley al Congreso para legalizar la interrupción voluntaria del embarazo.

"No vivo en paz con mi consciencia si una mujer termina en manos de un curandero y con una aguja la termina lastimando o matando", dijo mientras hablaba en un auditorio repleto en el Instituto de Estudios Políticos de París.

La locución del presidente no terminó allí, ya que agregó: "Voy a mandar una ley que termine con la penalización del aborto y permita la atención en cualquier centro público".