El lunes teníamos la noticia de la renuncia del ahora ex ministro de Seguridad, Juan Manuel Pulleiro, en medio de una ola de inseguridad y femicidios que sufre la provincia y que parece ser imposible de frenar. Horas después se anunció que el nuevo ministro será quien se desempeñaba como Procurador General de la Provincia, Abel Cornejo.
Cornejo dio una conferencia de prensa en el día de ayer, en el que confirmó que será el siguiente ministro de Seguridad y donde dijo que “es una vergüenza los índices que tiene Salta en materia de femicidios”.
“El fracaso de Pulleiro demuestra que la inseguridad reina en la provincia. Se debe apuntar a la prevención de la inseguridad. Cornejo es un hombre formado, que tuvo cargos importantes, puede aportar su experiencia como juez federal”, comentó al respecto el ex fiscal ante la Corte Alejandro Saravia, en Radio Pacífico.
Cornejo dejó vacante el puesto de Procurador y trascendió que Pedro García Castiella, el actual defensor general de Salta, sería quien lo reemplace como jefe de fiscales. “El consejo que le daría es que abra el abanico, que no se limite a la faceta penal, también existen acciones públicas civiles. Hay un montón de intereses colectivos que deben ser protegidos por el Ministerio Público. La procuración general es un cargo absolutamente desaprovechado porque solamente se pone el acento sobre el tema legal. Lo que me hace un poco de ruido es que los gobernadores tiendan a poner en la procuración gente de su confianza. Esas personas más que a controlar, tienden a cubrir”, aseguró Saravia.
Además, sostuvo que “los organismos de control deben estar encabezados por personas que no les interese el estado anímico de aquellos a quienes tienen que controlar”. Por otro lado, el ex fiscal habló sobre la inamovilidad de los jueces, algo que se tratará en la reforma de la Constitución de la Provincia.
“Yo creo que tendrían que poner como base los 50 años, darle una duración al cargo de 12 o 10 años, que no coincida con el recambio del gobernador, sin la posibilidad de ser redestinado de ese lugar, para garantizar la independencia. La designación debería hacer a través de un mecanismo que garantice excelencia. La independencia del Poder Judicial parte de la dignidad personal que tenga cada uno, no deviene de la inamovilidad”, manifestó Alejandro.