La crítica situación en materia sanitaria por la que atraviesa el norte de la provincia fue el foco de una serie de reuniones que el gobernador de la provincia, Gustavo Sáenz, mantuvo con los ministros de la Nación, Agustín Rossi (Defensa) y Gabriel Katopodis (Obras Públicas).
En uno de los encuentros el mandatario provincial fue recibido por Rossi, con quien coordinaron acciones inmediatas para dar respuestas a la emergencia sanitaria decretada en el norte salteño.
En el marco del encuentro, realizado en el edificio Libertador, Sáenz rubricó un acta de intención con el jefe del Estado Mayor General de Ejército, teniente general Claudio Pasqualini, por la cual la fuerza armada comprometió el envío a Santa Victoria Este de cuatro plantas potabilizadoras y camiones para distribuir agua en la zona.
El mandatario salteño detalló que,actualmente, la Compañía de Ingenieros de Agua 601 se encuentra realizando un reconocimiento del terreno y estudios geológicos para determinar factibilidad de perforación para luego extraer agua para su posterior potabilización.
Por otra parte, destacó que los equipos enviados por Nación serán desplegados de acuerdo a un plan de acción diagramado por el Ministerio de Infraestructura de la Provincia, conjuntamente con Aguas del Norte, y llevarán adelante un plan de obtención de agua a través de la perforación de nuevas fuentes.
Con respecto a la distribución del agua potable, se explicó que se realizará mediante la utilización de vehículos todo terreno, que estarán provistos de cisternas y brindarán asistencia a las comunidades originarias y parajes, cercanos a la ruta 54.
Participaron también de la reunión el ministro de Seguridad de Salta, Juan Manuel Pulleiro, el director de Ingenieros e Infraestructura, general Gustavo Garcés y el presidente del Instituto Provincial de la Vivienda, Gustavo Carrizo.
El gobernador también se reunió con Katopodis para gestionar apoyo y el financiamiento necesario para la ejecución de proyectos primordiales que permitan llevar agua potable de calidad a las comunidades vulnerables.
El plan incluye medidas paliativas urgentes y otras de fondo que demandarán un plazo de tiempo mayor.
Durante la reunión, Sáenz le planteó al ministro de Obras Públicas la problemática de la escasez de agua potable en la provincia y la consecuente vinculación directa entre la falta de agua potable y los indicadores sanitarios adversos en las comunidades vulnerables. "Se hace necesario tomar medidas paliativas urgentes y también generar soluciones definitivas", indicó el mandatario.
Acompañado por el ministro de Infraestructura de Salta, Sergio Camacho, el gobernador interiorizó al equipo de Nación sobre el plan de acción inmediato, que deberá estar focalizado en el departamento Rivadavia donde las características demográficas, geográficas y culturales ubican a las comunidades en una situación de vulnerabilidad extrema.
Por otro lado, fueron presentados los proyectos de infraestructura de envergadura que garantizarán un servicio de agua de calidad, específicamente en el departamento San Martín donde es un problema recurrente, pero que pueden ser extensivos a Rivadavia y otras regiones de Salta.
Sáenz también se juntó en dos oportunidades con el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, tras la muerte de tres niños por desnutrición.
Las obras se adecuarán a las necesidades
Durante el encuentro entre Sáenz y Katopodis se definió que, en el caso de San Martín, se necesitan obras para las localidades y en el departamento Rivadavia es necesario un tratamiento distintivo, con varias alternativas para la provisión de agua por tratarse de poblaciones dispersas.
En la reunión también estuvieron presentes el presidente de Enohsa (Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento), Enrique Cresto y el gerente del organismo Alejandro Hoc, quien estuvo en Salta el fin de semana.
Durante el encuentro también se hizo una presentación de proyectos de obras necesarias en otros puntos de la provincia, específicamente se analizó el caso de Rosario de Lerma donde Aguas del Norte tiene planificada la construcción de dos pozos de agua para mejorar el servicio.
Salta gestiona por una vieja deuda: infraestructura vial
Sáenz y Camacho plantearon en Vialidad obras en las rutas 40, 9, 68 y 34.
Sáenz y Camacho, con el titular de Vialidad Nacional.
El mejoramiento de la infraestructura vial es una de las materias pendientes en la provincia y, quizás, la mayor deuda del Plan Belgrano para con los salteños.
El pésimo estado de algunas rutas nacionales hace que la travesía carretera en Salta sea una pesadilla, ya sea para los turistas, los usuarios habituales o en el caso de la producción.
Ayer, el gobernador Gustavo Sáenz, junto al ministro de Infraestructura, Sergio Camacho, se reunieron con el administrador general de Vialidad Nacional, Gustavo Arrieta, para gestionar nuevos tramos viales y el mejoramiento de las rutas en distintos sectores de la provincia.
Durante el encuentro, mantenido en la ciudad de Buenos Aires, Sáenz solicitó la prioridad en el Presupuesto nacional de obras en la ruta 40 y la necesidad de mantenimiento en la ruta 9, en el tramo comprendido entre el cruce con la ruta nacional 34 y el acceso a Salta.
Además, solicitó el mejoramiento de la ruta 34, en el trayecto entre Rosario de la Frontera y el límite con la provincia de Jujuy, a través de la construcción de cuatro carriles de circulación, así como la construcción de la autopista entre General Güemes y la provincia Jujuy. Todas estas obras estaban previstas en el Plan Belgrano pero nunca salieron del plano de la promesa.
Por otra parte, el mandatario salteño destacó que se debe avanzar en los trabajos referidos a desagües pluviales en el Valle de Lerma, para posteriormente realizar mejoras en la ruta 68 y la generación de nuevos tramos sobre ruta 51, entre las localidades de San Antonio de Los Cobres y el Paso de Sico.
Por su parte, el titular del organismo nacional se comprometió a trabajar en la inclusión de las obras solicitadas en el Presupuesto 2020 y la factibilidad de iniciar sus ejecuciones durante este año.