Los investigados en la causa de los cuadernos de las coimas no solo involucraron a Néstor y Cristina Kirchner sino también al hijo de la exfamilia presidencial, el diputado del Frente para la Victoria Máximo Kirchner. La mención la hizo nada menos que José López, quien fuera mano derecha de Julio De Vido en el Ministerio de Planificación, y que está detenido desde junio de 2016 al tratar de esconder bolsos con casi U$S 9 millones en un convento en General Rodríguez.
En su declaración ante el fiscal federal Carlos Stornelli el exsecretario kirchnerista de Obras Públicas, que pidió convertirse en en arrepentido, mencionó al diputado al hablar sobre La Cámpora (agrupación que lidera el hijo de la expresidenta) y el circuito de “recaudación” ilegal por sobornos que empresarios de la obra pública le pagaban a exfuncionarios durante el kirchnerismo para financiar campañas electorales.
José López fue quien involucró en su declaración a Máximo Kirchner.
El exfuncionario espera que el juez federal Claudio Bonadio homologue su declaración como arrepentido. La defensa oficial de López, a cargo de Gustavo Kolman, ya notificó al magistrado del acuerdo de colaboración que cerró Stornelli. Se espera que el juez lo cite nuevamente para ratificar ese acuerdo, en una audiencia en la que podría ampliar la indagatoria.
López pidió protección e ingresó al Programa Nacional de Protección a Testigos e Imputados, está alojado en un lugar especial que, por motivos de seguridad, no puede ser develado. Está custodiado por el grupo especial de seguridad conocido como “Los Lobos”, el programa de élite del Servicio Penitenciario Federal para la custodia de testigos, según informa La Nación.
La vinculación de López en el caso de los cuadernos se dio luego de que Germán Nivello, exsubsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, lo nombrara en la Justicia. Este exfuncionario aparece mencionado al menos dos veces en las anotaciones que hizo el chofer de Roberto Baratta, Oscar Centeno.
Fuente: El Tribuno