La Municipalidad de Salta presentó un presupuesto para el año que viene de 14.300 millones de pesos y propone eliminar 11 impuestos municipales, al tiempo que espera que el Concejo Deliberante apruebe ambas cosas a mediados de la próxima semana.
“Es bastante el trabajo para realizar, acordar y analizar. En este nuevo código tributario se simplifica un poco muchas tasas que cobraba la municipalidad. Esas tasas que se eliminan son 11 y no son las que habitualmente paga el común e la gente, en general son tasas que tienen que ver con actividades comerciales”, explicó el concejal José Gauffin en Radio Pacífico.
Para obras públicas se destinará el 14,7 por ciento de los recursos. Sobre este punto, de los 2.100 millones contemplados para obras, 1.200 millones saldrán de las arcas municipales, mientras que los 900 restantes llegarán como parte de los convenios que la intendenta Bettina Romero firmó con el Gobierno nacional.
“No estoy conforme con el presupuesto, creo que tenemos que revisar el tema de la coparticipación. Tenía una mayor expectativa respecto a las partidas presupuestarias de obras públicas. Creo que lo que está pasando es que no terminamos de tener una gestión ágil para concretar proyectos”, sostuvo Gauffin.
Por otro lado, el concejal informó que de este presupuesto el 41,5% está destinado a salarios, se bajó medio punto del año pasado que era el 43% y consideró que “es un porcentaje alto, pero creo que está en mucho mejores condiciones que en otras oportunidades”.
Al ser postulado por la gestión de Bettina Romero el edil dijo que su puntaje era un 6 “porque evidentemente los cambios de gabinete muestran que no termina de encontrar el equipo ideal para llevar adelante la gestión”.
Respecto al incremento de la unidad tributaria que se espera que el Concejo Deliberante apruebe en los próximos días y lo que terminará siendo un aumento de 238% en los dos años de gestión de Romero, Gauffin sostuvo que “hoy en día todos pagamos el mínimo del impuesto inmobiliario” y aseguró que los concejales tienen “la responsabilidad de controlar que cada peso que ingresa a la municipalidad se vuelque en obras”.