La oposición trabaja contrarreloj para poder sesionar este miércoles en la Cámara de Diputados, con la idea de tratar un solo tema: la reforma de la Ley de Alquileres. En ese contexto, la presidencia de la Cámara de Diputados citó a los legisladores para mañana a las 12.
Los jefes de la oposición realizaron en los últimos días un zoom en el cual establecieron que buscarán alcanzar los 129 legisladores que se necesitan para avanzar en el debate y así, en paralelo, modificar algunos aspectos del dictamen de la minoría, principalmente en lo que se refiere al mecanismo de ajuste de los alquileres.
Lo que quedó descartado en la charla virtual del viernes es buscar la derogación de la ley, como propuso en varias ocasiones el diputado Hernán Lombardi, hombre muy cercano a Patricia Bullrich y uno de los denominados “halcones” dentro del bloque de los diputados amarillos.
“Estamos cerca del quórum, en realidad no deberíamos tener problemas, pero estamos viendo qué hacen los tres diputados de Javier Milei y los dos misioneros”, explicó una fuente del interbloque de Juntos por el Cambio. En el caso de los parlamentarios del noreste argentino, se refieren a Diego Sartori y Carlos Fernández, del bloque Frente de la Concordia Misionero.
Por el lado del libertario, las dudas surgen porque hasta ahora no dio señales de su participación. Sin embargo, el propio Javier Milei fue quien firmó el llamado a la sesión especial con Juntos por el Cambio y los interbloques Federal y Provincias Unidas.
En total, con la reciente incorporación de José Luis Espert a la bancada, Juntos por el Cambio suma 117 diputados; el interbloque Federal tiene 8 y el Provincias Unidas tiene 4. La suma da los 129 legisladores necesarios. Sin embargo, con la renuncia del diputado del PRO Gustavo Santos quedan en 128, ya que su reemplazante va a poder asumir si hay quórum, lo que le permitiría votar.
Hasta ahora, sin los misioneros y el bloque de La Libertad Avanza, -siempre y cuando haya asistencia perfecta- faltaría un diputado para acceder al número necesario. En este escenario, y mientras se espera que se expidan los libertarios y los misioneros, la oposición trabaja en modificaciones del dictamen.
El proyecto que busca aprobarse establece: retrotraer los contratos a un plazo de dos años -no de tres como es hoy-; y que el modelo de ajuste sea acordado entre las partes, dejando abierta la posibilidad definir de los plazos, y que se rija por el Código Civil y Comercial como un acuerdo privado.
Este es un punto en el que se trabaja, ya que en el proyecto que obtuvo dictamen quedó establecido que los ajustes de los alquileres se podrían acordar “por intervalos de entre 3 y 12 meses”. Lo que los legisladores buscan es que la periodicidad de las subas de los alquileres se acuerde entre las partes, tomando el indicador de la economía que convengan.
Por el lado del oficialismo ya avisaron que, para que el debate se desarrolle, es responsabilidad de la oposición conseguir el quórum. “Ellos pidieron la sesión, son ellos los que tienen que alcanzar el número”, sostienen.
Asimismo, desde el Frente de Todos buscarán avanzar con el dictamen de mayoría que propone mantener el plazo de 3 años, ajustes anuales y beneficios impositivos para los propietarios que vuelquen sus propiedades al mercado de alquiler.
En la actualidad, en las grandes ciudades la oferta de propiedades en alquiler en pesos se encuentra en su mínima expresión: la mayoría de los contratos que se ofrecen están en dólares. En ese sentido, uno de los puntos que saldrá en el debate es la posibilidad de regular el mercado de los alquileres temporarios. Sólo la plataforma Airbnb, la más popular en ese sistema, tiene poco más de 26.000 propiedades en alquiler temporario.