POLÍTICA

Macri se mueve para garantizarle a Milei fiscales de cara al balotaje

Macri se mueve para garantizarle a Milei fiscales de cara al balotaje

El ex presidente aportará soporte desde el PRO para fortalecer el esquema de La Libertad Avanza. Se comunicó con decenas de intendentes y gobernadores. En total, necesitan 110 mil personas para cuidar el voto en todo el país.

“Si Milei fiscaliza bien, gana la elección”. Son palabras de armador político de peso en Juntos por el Cambio (JxC). “La gente del PRO se ha mostrado muy predispuesta a colaborar”, responde uno de los referentes de La Libertad Avanza. Son declaraciones que desnudan las primeras cláusulas de la letra chica del Pacto de Acassuso.

El principal correlato del acuerdo entre Mauricio Macri y Javier Milei se verá reflejado el domingo 19 de noviembre, durante el balotaje contra Sergio Massa. Ese día, La Libertad Avanza tendrá en la cancha un millar de fiscales aportados por el ex mandatario, provenientes de dirigentes del PRO que le responden. Patricia Bullrich, otrora presidenciable de JxC y titular del partido amarillo, también formó parte de la alianza y movió hilos para garantizar el soporte logístico el líder libertario.

“Ayer a la tarde me llamó Mauricio (Macri) y me pidió que ‘le diera una mano’ a Milei con la fiscalización acá”, le reveló a Infobae un intendente de JxC. Y así sucede desde finales de octubre. Sellado el pacto con los libertarios, el ex Jefe de Estado activó su celular y generó decenas de reuniones políticas en sus oficinas de Olivos. Desde allí se movió para contactar a dirigentes, armadores y punteros del PRO y de JxC para pedirles que le fiscalicen la elección a Milei.

Macri conoce que el balotaje es mano a mano y que la estructura del peronismo hace sentir su peso. La Libertad Avanza es un frente que tomó alcance nacional en menos de dos años, a la velocidad de la luz, y no logró aún constituir un esquema de fiscales para garantizar la custodia del voto en el acto eleccionario en cada local de votación a lo largo del país.

En las PASO salió a la cancha con un esquema limitado. Por la inercia del triunfo, en octubre pudo robustecer su fiscalización, sobre todo de la mano de la alianza con Luis Barrionuevo, titular del gremio de Gastronómicos. El catamarqueño facilitó recursos humanos y, sobre todo, colaboró con viáticos y viandas para los fiscales. Pero desde que Milei pactó con Macri, el sindicalista pegó un portazo y se alejó de La Libertad Avanza. Por eso ahora, el PRO, de la mano del ex presidente y Bullrich, garantizará el soporte que le falte al libertario para completar el ejército de ciudadanos necesario para cuidar cada voto.

Para el balotaje hay habilitados 35.394.425 de electores en todo el país, distribuidos en 16.900 locales de votación y 106.160 mesas entre nacionales y extranjeras. En cada mesa pueden votar hasta 350 personas. Es decir, puede haber hasta 350 votos por mesa. En una elección de segunda vuelta, mano a mano, cada voto es decisivo. Por eso, un esquema de fiscalización puede sentenciar un triunfo. De ese universo, la provincia de Buenos Aires tiene 13.110.768 electores que representan el 37,04% del padrón nacional, mientras que en Córdoba votarán 3.065.088 ciudadanos, lo que alcanza al 8,66% del total de votantes de Argentina.

Para cubrir ese mapa, se estira que una fuerza política requiere de 110 mil fiscales en todo el país, repartidos entre fiscales de mesa, quienes permanecen sentados durante la jornada en una misma mesa, y fiscales generales, que tienden a ser personas más experimentadas que se mueven constantemente el día de la elección y supervisan en simultáneo todo local de votación. De esas cifras, Buenos Aires implica 41 mil fiscales para cubrir los 135 municipios de la provincia. En tanto, cerca de 30 mil son destinados a fiscalizar en el conurbano. En las generales octubre, Milei sólo tuvo 30 mil fiscales en territorio bonaerense. “Ahora el PRO nos va a aportar lo que nos falta”, explicó un dirigente que frecuenta el búnker de La Libertad Avanza en el Hotel Libertador.

Por parte del PRO, Macri y Bullrich designaron a Paula Bertol y a Guillermo Dietrich para coordinar la tarea operativa. Mientras que desde la Libertad Avanza Guillermo Ferraro está a cargo de la fiscalización a nivel nacional y Sebastián Pareja en Buenos Aires. En tanto que en Córdoba, el otro distrito clave para esta elección, Laura Rodríguez Machado y Soher El Sukaria dan soporte por parte del PRO, mientras que Gabriel Bornoroni y Rodolfo Eiben comandan la logística en nombre de Milei.

Milei conoce que ante un triunfo de Massa en el conurbano necesitará replicar los guarismos que obtuvo Macri en el 2015 contra Daniel Scioli: el líder del PRO ganó con el 70% de los votos en territorio cordobés. “Necesitamos la fórmula del fernet, 70-30″, bromean en La Libertad Avanza. Por eso, la fiscalización resultará clave en todo el país, pero centralmente en el conurbano y en Córdoba.

Desde el pacto de Macri y Milei se inició un proceso para amalgamar equipos y estructuras. Los primeros días, desde el PRO quisieron avanzar y cargarse al hombro la fiscalización. Eso generó ruidos con los libertarios. Sin embargo, desde La Libertad Avanza marcaron la cancha y pidieron manejar la situación. “Se respeta a La Libertad Avanza, fiscalizamos nosotros, porque al balotaje va Javier (Milei). Las estructuras que fiscalizan son de La Libertad Avanza. El PRO lo que hace es fortalecer y aportar capacidad de trabajo y experiencia donde nosotros necesitamos”, aclaró ante este medio un operador político libertario.

Por estas horas, los referentes y armadores políticos de Milei trabajan para “matchear” distrito por distrito el esquema de fiscalización de La Libertad Avanza con el del PRO. A partir de ahí, ordenan y demandan soporte al partido fundado por Macri. Los intendentes amarillos supervisan la logística, mientras que en los distritos gobernados por el peronismo lo hacen los territoriales del JxC que fueron candidatos a intendente de su municipio y cuentan con una estructura local de fiscales.

Una tarea clave que hacen los libertarios en ese proceso es filtrar para evitar “infiltrados”. Es decir, personas que se ofrecen voluntariamente para fiscalizarle a Milei y que, en verdad, responden a Massa y se acercan al libertario con el fil de viciar el escrutinio. “Donde hay sospecha, se corre al sospechoso de la fiscalización”, aseguró a este medio un asesor de Milei. De hecho, el equipo de campaña de La Libertad Avanza ya tomó decisiones después del 22 de octubre: echaron a todo el equipo de fiscalización de José C Paz. “Entregaron la boleta de Milei”, explicó a Infobae un operador político bonaerense de los libertarios.

A 12 días del balotaje, en la usina política de Milei y en el macrismo deslizan que habrá dos aspectos clave para determinar el resultado de la elección. Primero, el desempeño de los candidatos en el debate presidencial del domingo que viene. Y segundo, la correcta fiscalización de la elección.



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