WASHINGTON.- El presidente Mauricio Macri llegará mañana a la cumbre de presidentes por la energía nuclear y mantendrá una nutrida agenda paralela con un firme objetivo: anunciar al mundo que la argentina ya está lista para salir del default.
Todo indica que Macri llegará a Washington con la aprobación del Senado de las leyes que habilitan al gobierno a negociar con los holdouts. Con esa carta bajo el brazo, Macri mantendrá al menos seis reuniones bilaterales con sus pares de China, Xi Jinping; de Japón, Shinzo Abe; de Canadá, Justin Trudeau, de Nueva Zelanda, John Keyy; de Corea del Sur, Park Geun-hye; y de la India, Narendra Modi.
Macri mantendrá esos encuentros en paralelo al desarrollo de la cumbre. La idea del Presidente es anoticiar al mundo que el conflicto con los holdouts ya casi está superado. "Vamos a mostrar al mundo que podemos ser un país confiable y abierto a las inversiones", dijo a LA NACION un allegado al jefe del Estado. En este sentido, se espera que haya anuncios tras las reuniones bilaterales y estos encuentros sumen confianza a la Argentina.
A la vez, Macri se reunirá informalmente con Barack Obama. Esto será mañana cuando el presidente norteamericano reciba en la Casa Blanca a unos 53 presidentes que vienen a la Cumbre de Energía nuclear. El encuentro será una cena de honor que ofrece Obama en esta ciudad movilizada por un fuerte dispositivo de seguridad. Macri regresará el viernes por la noche a la Argentina.
Macri llega también a esta cumbre de presidentes con la intención de mostrar todo el desarrollo de energía nuclear que viene haciendo el país. Además, un argentino figura entre los candidatos a ocupar la presidencia de la organización internacional de energía nuclear (OIEA). Se trata de Rafael Grossi, actual embajador en Viena.
Fuente: La Nacion