Este jueves, Juan Schiaretti le puso el broche final a su carrera presidencial. De cara a las elecciones de este domingo, el candidato se mostró con la expectativa de sorprender ante el crecimiento logrado en los últimos días de campaña. Por eso buscará mostrar músculo político y ser la alternativa peronista no kirchnerista del interior, frente al gobierno nacional que asuma desde diciembre.

El gobernador hizo una campaña corta pero con alto impacto a nivel nacional. La buena performance en los dos debates presidenciales y las giras en medios nacionales en las últimas horas, le permitieron mostrarse como el único candidato del interior y gestor de un modelo que funciona en la Argentina de hoy, como es el de Córdoba. Si bien pocos se animan a hablar de encuestas, calculan que el candidato lograría incrementar el caudal de votos en 7 puntos, alcanzando alrededor de un 10% nacional. Un resultado como el que vaticinan, lo dejaría en buena posición para próximas negociaciones en un eventual ballotage.

“Buscamos que en Córdoba sea el más votado” aseguran desde el entorno del Gobernador. El equipo de Schiaretti está conforme con el trabajo que han realizado. Ven “al Gringo” disfrutar de los últimos días de campaña. En este trecho pudieron mostrar “el modelo Córdoba” que continuará adelante encabezado por su sucesor Martín Llaryora, a quien considera como un acierto político por haberlo elegido para lograr la transición natural, en una provincia que lleva ¼ de siglo de gobiernos peronistas.

Tal como lo remarcó en sus últimas apariciones, Schiaretti juega en nombre del peronismo no colonizado por el kirchnerismo y abre la puerta para que la nueva generación que lo sucede ingrese con capital político al juego nacional.

Los candidatos a Diputados de esta lista han logrado posicionarse, puertas adentro de la provincia, como “los Diputados de Córdoba”. Si bien Hacemos por Nuestro País no promovió el corte de boleta, esta tendencia se empieza a imponer ante una posible polarización de la elección: Elegir a un candidato que pueda entrar al ballotage y cortar boleta a favor de los representantes a la cámara baja del frente cordobesista.

Más allá de quién sea el próximo Presidente, el gobernador es un animal político que buscará su lugar en la mesa de discusión del peronismo nacional que se empieza a reconfigura. En caso de no ganar la elección presidencial, en dos años habrá legislativas y tiene chances de competir nuevamente, contando hoy con más del 70% de imagen positiva en su distrito.

Schiaretti abrió su discurso de cierre de campaña apuntando en contra de Massa: “El Presidente y la vicepresidenta están desaparecidos y quien gobierna es Massa, el ministro de más de 140% de inflación anual”

En Córdoba, el peronismo kirchnerista tiene pocas chances. “Sergio Massa hizo una buena elección, pero carga con la mochila de un mal gobierno” remarcan desde el schiaretrismo, mientras que un grupo de intendentes peronistas del interior, aún leales al delasotismo y a su vínculo con Massa, hicieron campaña por el corte de boleta a favor del tigrense. A Bullrich la ven “desinflada” y a Milei desgastado. “El grito del interior y el grito federal”, como lo describió Martín Llaryora en su discurso de cierre de campaña del gringo, no pierde las esperanzas de ganar esta partida con un resultado de dos dígitos que le permitan jugar en las grandes ligas.

En su cierre de campaña, Schiaretti hizo énfasis en las principales medidas que adoptaría en caso de llegar a la presidencia. “Acabar con el cepo al dólar, desdoblar el tipo de cambio y terminar con las retenciones al campo”, remarcó. Y sostuvo que buscará acabar con el cepo al dólar. “Vamos a desdoblar temporalmente el tipo de cambio para que haya uno comercial que sea competitivo y otro que sea libre para quienes quieran comprar y lo hagan legalmente y no terminar en una cueva”, indicó.

Aferrados a los buenos resultados en elecciones pasadas en Córdoba, Juntos por el Cambio hizo su cierre de campaña en el interior. Este miércoles Patricia Bullrich eligió la ciudad de Río Cuarto como epicentro para hablarle a la Pampa Gringa y cosechar los votos que le permitan entrar al ballotage, aunque esta vez hay dos factores determinantes que la vuelven a condicionar: El fenómeno Milei del cual Córdoba no fue ajeno en las PASO, y la candidatura de Schiaretti, a quien el cordobés desperoniza y apoya por su buena gestión.

Desde el equipo de Bullrich mencionan que Río Cuarto fue elegida estratégicamente para llegar con un mensaje de desarrollo productivo y mirar al interior del interior. Confían en que “el voto útil” de Schiaretti se va a trasladar a Patricia.