El ministro de Economía y candidato presidencial del oficialismo, Sergio Massa, permanecerá al frente del Palacio de Hacienda hasta el final del actual gobierno. “Me quedo hasta el 10 de diciembre”, señaló en una entrevista a TN.
“Nunca suelto el timón en medio de una tormenta”, dijo en relación a una eventual salida de su cargo. Señaló que es “lo peor que podría hacer, sería hacerle mucho daño a la estabilidad económica argentina, que de por sí, está afectada por el pedido del Fondo Monetario Internacional (FMI), que establecía un mecanismo de devaluación que no se cumplió hasta agosto del año pasado. Además es un mecanismo inflacionario y ahora se ve agravado por un año en el que Argentina tenía muy mal armado el cronograma de vencimientos para el segundo semestre, de la negociación del ministro que se fue, que huyó, y con el agravante de la sequía”, comentó.
Massa reapareció en los medios tras las elecciones internas y advirtió que en las próximas horas se conocerán nuevas medidas económicas, orientadas principalmente a detener el alza de los precios: “Desde mañana se van a conocer anuncios respecto a estabilidad de precios y situaciones de compensación del daño que la inflación provoca en el bolsillo de la gente”.
En ese sentido, adelantó que en materia salarial “habrá una suma fija, lo estamos discutiendo con la CGT, se va a anunciar la semana que viene. Va a haber un esfuerzo además adicional con asignaciones familiares, vamos a reforzar la Asignación Universal por Hijo (AUH) y vamos a analizar el impacto en las jubilaciones”.
Según el ministro, la respuesta del electorado que apoyó a Javier Milei tiene que ver con que “la Argentina viene de muchos años de frustración, de fracasos, de dificultades que van reapareciendo. Eso genera que la gente exprese su enojo en las primarias. Así apareció este escenario de tercios que era impensado hasta hace poco”.
“El FMI arrancó pidiendo 100% de devaluación hace tres meses, después se plantaron en 60% y luego se cerró una negociación del 20%. Si ese 20% generó este lío, imagínense lo que puede pasar si Patricia Bullrich cumple con lo que prometió, levantar el cepo el primer día de Gobierno. Eso es una devaluación del 100%, lo que pide el Fondo”, señaló Massa, quién explicó que esa devaluación era un requisito para el desembolso de USD 7.500 millones. “Desde el 2021 hasta ahora, traíamos un retraso cambiario de 19 puntos y medio”, dijo.
Massa dijo que se están viendo candidatos “que usan los recortes de los programas para hacer redes de frases fáciles que viralizan, que para aquel que está preocupado por su día a día, esas consignas fáciles suenan como soluciones mágicas a sus problemas”.
“Lo que la Argentina necesita es un programa de desarrollo exportador, que el año que viene le va a significar al país USD 50.000 millones más de ventas, que de importaciones. Es el camino que hay que recorrer, en medio de un contexto del acuerdo con el FMI que nos dejó Macri, con la sequía y con el pedido de devaluación”, agregó.
En relación con la negociación que el Gobierno lleva adelante con el sector privado y el impacto de la devaluación, Massa explicó que Economía se está reuniendo “con los productores de artículos de primera necesidad, estamos con el 90% de las empresas con acuerdos de precios. Hay un dato de la devaluación que pasó desapercibido. El tipo de cambio oficial queda establecido hasta el 30 de octubre. Es $350 hoy y va a ser también de $350 hasta octubre”.
“El objetivo central son los alimentos y productos de primera necesidad. En algunos casos se está iniciando un retroceso de remarcación. Cerramos un sendero de 5%, 5% y 5% para los próximos tres meses y estamos bajándole impuestos. Estamos cediendo parte de los recursos del Estado a las empresas que acuerden con el gobierno”, agregó.
“Los que no cumplan no tendrán una simple multa de la Secretaría de Comercio, porque están accediendo a beneficios impositivos. A los que no entren y abusen, les vamos a caer con todo el peso de la ley”, dijo Massa.
Sobre el peso del nuevo valor del dólar, Massa explicó que en la producción, “el componente de devaluación puede significar el 3% o 4% si importa la matriz. Ahora, que hay en la Argentina hay avivadas, hay avivadas”.
“Las cadenas de supermercados vienen cumpliendo con los acuerdos de precios, pero hay chinos y almacenes de barrio que no. Algunos, porque son víctimas del mayorista. Yo le pido a los almaceneros que denuncien a esos mayoristas, porque ellos sí tienen beneficios impositivos, acceso a un tipo de cambio diferenciado y a un régimen de importación acelerada para garantizar abastecimiento”, concluyó el ministro de Economía.