En Rosario de Lerma, la tormenta dejó secuelas. Las banquinas de la ruta provincial 23, a la altura del paraje San Martín desaparecieron. Fueron arrasadas por el agua en un paso de agua, que sufre un deterioro histórico y donde la cinta asfáltica se ha convertido en una barrera casi infranqueable para vehículos pequeños y medianos.
La céntrica calle Hipólito Yrigoyen continuación 9 de Julio se anegó por completo, tal como sucede con cada lluvia. Fuentes municipales informaron que no hay evacuados.
Desde la Dirección de Seguridad Urbana señalaron que se llevó a cabo la asistencia a vecinos a quienes le ingresó agua a sus viviendas. "En la ruta 23, altura paraje San Martín el tránsito estuvo cortado por completo. Allí trabajamos junto a Transito y Seguridad Vial, y la efectivos de la Policía estuvimos desde las primeras horas advirtiendo a los conductores no transitar por ese sector", dijeron. A raíz de dicha situación el tránsito hacia la ciudad de Salta fue desviado por la ruta provincial 36, para luego continuar por la nacional 51.