Hoy, a las 16, el sector empresario del transporte de pasajeros y la Unión Tranviarios Automotor (UTA) tendrán una nueva audiencia convocada en el marco de la conciliación obligatoria que dictó el Ministerio de Trabajo de la Nación el pasado 18 de mayo. La medida evitó que el país quedara sin colectivos desde la primera hora del viernes 19, pero la tregua expira este lunes sin que hubiera acercamientos ni definiciones en torno de la recomposición salarial que exigió el gremio para los trabajadores del transporte automotor de pasajeros del interior del país, en sintonía con las paritarias del área metropolitana de Buenos Aires.

"El consejo directivo nacional de la UTA llamó, en caso no tener una respuesta concreta y afirmativa a las mejoras salariales reclamadas, a iniciar desde la cero hora del martes 30 medidas de fuerza gremial en todo el territorio del país", ratificó ayer al diario El Tribuno el secretario general del gremio en Salta, Miguel Barrera, en relación al paro de colectivos que tendría alcance nacional desde el primer minuto de mañana y por 24 horas.

La UTA reclamó una recomposición salarial retroactiva que llevara el básico a $262.000 desde abril, a $284.000 desde mayo y $320.000 desde junio, además de un bono de $32.000 a pagarse por única vez y con carácter no remunerativo. El gremio también demandó un incremento proporcional en los viáticos que los lleve a $1.626 desde mayo y a $1.832 desde junio por cada día efectivamente trabajado.

Ayer, a través de un comunicado, empresarios nucleados en la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP) manifestaron que no podrán llegar a un acuerdo por la recomposición, mientras los gobiernos Nacional, provinciales y municipales "continúen sin generar las compensaciones necesarias contractualmente previstas".

En el comunicado, la entidad sostuvo que a las empresas que atienden los servicios de transporte de pasajeros en el interior del país les resulta "imposible" enfrentar los incrementos salariales y de costos operativos sin subsidios como los del Fondo Compensador y otras asistencias de la Nación y los estados provinciales.

"A pesar de la claridad de la situación, los contratos de concesión no se cumplen, porque las tarifas se fijan en base a criterios políticos y no a las normas técnicas en ellos establecidas. Los convenios suscriptos entre Provincia y Nación tampoco se respetan, porque las provincias no cumplen con su obligación de garantizar la sustentabilidad del sistema y porque el Estado Nacional fija los aportes al Fondo Compensador al Transporte del Interior (incumpliendo normas preexistentes) ignorando el grave proceso inflacionario vigente, omitiendo los ajustes necesarios y distribuyendo los fondos tardía y arbitrariamente (en algunas jurisdicciones no se han cancelado aún períodos del año 2022), sin criterios objetivos verificables", puntualizó la FATAP.

El sector empresario, no obstante, afirmó que desde la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros continuará extremando esfuerzos con el sindicato que nuclea a los trabajadores de la actividad para garantizar la prestación de un servicio esencial para los argentinos. "Debemos advertir que, sin acciones concretas y eficaces de las autoridades responsables de garantizar la regularidad y continuidad de los servicios, aquel esfuerzo será en vano", concluyó la FATAP en el comunicado que acrecentó las dudas sobre las respuestas que podría tener la UTA en la audiencia de esta tarde. En la previa, todo parecería indicar que difícilmente la conciliación obligatoria tendrá hoy un cierre que evite el paro de transporte, a menos que la cartera de Trabajo extienda la conciliación obligatoria.