El 10 de enero se conoció el ultimátum: desde el 15 de enero los centros privados de diálisis dejarían de prestar el servicio de traslado para pacientes en Salta, por una deuda millonaria del Gobierno Nacional.

Este miércoles 15, las partes se reunieron para tratar, a último momento, de llegar a una solución; pero no la encontraron: el gobierno nacional adeuda 62 millones de pesos. No paga desde julio.

El servicio de transporte es indispensable ya que muchos pacientes no pueden costear el pago de un remis y el subirse solos a un colectivo implica el riesgo de desmayarse al salir de las diálisis.

Nora Marchetta, de CEPRIDIASA (Centros Privados de Diálisis de Salta), dijo a LA GACETA que hoy ni siquiera los atendió el titular de PROFE-Incluir Salud en Salta.

Recalcó que, para colmo, cuatro meses y medio ya están vencidos y ni hablar de la inflación. Y advirtió: “En febrero, si no nos pagan lo que nos deben, ya no vamos a brindar el servicio diálisis”, dijo.

El 10 de enero, el coordinador de Incluir Salud Salta, Carlos Saravia, reconoció que existen atrasos de pagos con CEPRIDIASA debido a que Nación no envía fondos. “De todas maneras, todo paciente que necesite ser dializado, no va a quedar sin recibir este servicio, pero el tema del traslado es un tema aparte que no tiene nada que ver con las diálisis”, indicó el funcionario a LA GACETA.

Según Marchetta, la postura que tomó Incluir Salud es que va a hablar con cada paciente, averiguar  dónde vive, a qué hora se hace la diálisis y se hará cargo de trasladarlos. "No sé si contratarán taxis. Algunos viven en parajes. Gente de Colonia Santa Rosa, en los valles, es complicado organizar en 15 horas una logística para 230 pacientes”, dijo.