Médicos de una extensa trayectoria se manifestaron a favor de la legalización del aborto, cuando falta menos de un mes para que el tema se defina en el Congreso de la Nación. En contraposición a lo que vienen planteando en Salta integrantes del grupo Profesionales por la Vida, advirtieron que los costos que afronta hoy el Estado por la atención de pacientes con abortos mal realizados son mayores a los que demandaría la legalización de la práctica.
Los médicos destacaron que una gran cantidad de mujeres llegan a las instituciones de salud pública luego de un aborto clandestino y que muchas fallecen o quedan con secuelas graves.
"¿Sabe lo que le cuesta al Estado una complicación de una mala práctica de aborto?", preguntó Víctor Hugo Correa, a lo que luego respondió: "Son millones. Perforación de útero, de intestino, terapias intensivas... Una complicación cuesta más. Además quedan muchas secuelas, como no poder tener niños nunca más".
César Aguirre fue parte del Colegio Médico durante 25 años. Ocupó la presidencia y vicepresidencia. "Hay que ir a ver solo por 24 horas una guardia de un hospital materno infantil, por ejemplo. Caen mujeres con hemorragias importantes o con alguna perforación intestinal porque el que se lo hizo no tenía idea de lo que estaba haciendo, porque muchas veces se lo hacen con lo que pueden", relató.
"Hay un síndrome que se le llama tricolor. Algunas llegan pálidas por las pérdidas, amarillas por insuficiencia hepática por la sepsia, porque se dejó pasar tiempo, y moradas por el trastorno circulatorio", agregó Correa.
"El que está decidido a hacerlo lo va hacer de cualquier forma. Es la que termina poniéndose el perejil, que después se infectan. Esos casos ya no van a un legrado, sino a sacar la matriz", resaltó Aguirre.
La realidad económica, que limita el acceso a métodos seguros para gran parte de la población, es el argumento principal de los que apoyan la despenalización. "No es lo mismo aquel que puede pagarse una clínica con una hotelería de primera, que aquel que lo va a hacer donde es un ranchito con un camastro, sin nada esterelizado", manifestó Aguirre.
Abortos clandestinos
En cuanto a las denuncias hacia personas o profesionales que realizan abortos clandestinos, Aguirre advirtió que la mujer guarda silencio, incluso cuando su vida está en riesgo. "La paciente puede estar muriéndose y se te mueren desangradas sin decir quién fue", dijo.
El profesional explicó además el proceso que debe seguir el médico al recibir a una paciente con un aborto mal realizado. "Fijate la mentalidad de esa mujer, qué es lo que va hacer el médico. No es que si quiere o no, debe dar parte. Hace la denuncia de que entró alguien con un aborto mal hecho", sostuvo.
Por su lado, Correa hizo hincapié en que la práctica se arrastra hace años y que se mantendrá en el tiempo. "El aborto existió desde que existe el hombre. Hubo, hay y va haber. Eso se sabe, no es algo nuevo. Solo que se reflota por el tema de la ley", aseguró.
Uno de los argumentos que se expusieron en contra de la legalización es que la cantidad de abortos aumentará. Haciendo foco en la decisión de la persona, Aguirre aseguró: "No vas a hacer que revierten los consultorios abortivos".
"Dicen: "aborto es matar'. No, es despenalizar. Despenalizar una ley no estimula a hacerte un aborto", destacó Correa. Para el médico, las convicciones personales definen la decisión sobre la interrupción del embarazo.
Utilizando la frase de base de los grupos que se denominan provida, aseguró: "Nosotros peleamos por la vida, todo médico pelea por la vida. Pero esta despenalización es darle la seguridad a esa mujer que decidió el aborto, en toda la República Argentina, de una prestación con garantías".
Ambos médicos son miembros de la Comisión Médica del Círculo Médico pero remarcaron que sus opiniones son personales y no reflejan la posición de la institución, que "representa a miembros de diferentes ideologías y creencias".
"Nosotros tenemos el libre albedrío de pensar independientemente y aparte la moral es propia. Nunca va a haber uniformidad porque tampoco hay mandamientos éticos que sean para todos iguales", manifestó Aguirre.
La posición que se había conocido hasta el momento fue la de los médicos del grupo Profesionales por la Vida, que realizó la semana pasada un "abrazo al Hospital Materno Infantil" para expresarse en contra de la legalización del aborto. Es la segunda convocatoria de este tipo que realizan desde que el proyecto obtuvo media sanción en Diputados.
El Círculo Médico no regula las matrículas
El organismo aclaró sobre la regulación de la actividad de los profesionales.
Tras declaraciones de la pediatra María Iturrieta que se difundieron por este medio, el Círculo Médico de Salta salió al cruce y aclaró sobre sus injerencias.
“Hace muchos años casi me sacan del Círculo Médico por denunciar eso. Dije que no podía ser que muchos médicos que hacen abortos tengan su matrícula profesional. No se hace nada”, afirmó la especialista durante la manifestación que el grupo Profesionales por la Vida hizo frente al Hospital Materno Infantil el lunes.
Sin embargo, desde el organismo que nuclea a 3 mil médicos de toda la provincia, desmintieron sus dichos.
“La doctora Iturrieta es socia vitalicia. Para llegar a serlo, no tiene que tener ninguna denuncia ni irregularidades, tiene que tener un currículum limpio”, afirmó el doctor Víctor Hugo Correa, miembro de la Comisión Médica del Círculo Médico. Y añadió: “Si hubiera sido casi sacada, como dijo, debería haber alguna nota de apercibimiento y no la hay”.
Para el doctor César Aguirre, también integrante de la Comisión Médica, hay “una mala intención manifiesta, en el sentido de que ella sabe la diferencia entre Círculo y Colegio, lo que le compete a cada uno. Se lo perdonaría a un colega que recién llega a Salta y desconoce”, advirtió.
Ambos médicos hicieron especial hincapié en la diferencia entre el Colegio de Médicos y el Círculo en cuanto a la regulación de las matrículas habilitantes para el ejercicio de la medicina.
“Lo que denunció esta colega es imposible porque a las matrículas las habilita o las saca el Colegio Médico. Si se suspende alguna matrícula, el Colegio nos comunica a nosotros y nosotros les informamos a las obras sociales que el profesional tiene la matrícula suspendida”, explicó Correa.
Para el médico, el que la pediatra haya realizado denuncias sin nombres certeros es un daño para los profesionales. “Al hacer esta denuncia grave, tendría que ser puntual. Porque, si no, colegas pueden sentirse afectados en menor o mayor gravedad. Generalizar hace daño”, señaló.
Aguirre, con una experiencia de 25 años en el Colegio de Médicos, hizo especial hincapié en que “no hay una justicia paralela”. Explicó que la denuncia por aborto clandestino “no le compete al Colegio sino a la Justicia”. Afirmó que, mientras trabaja la Justicia, “el Colegio se llama al silencio” y actúa una vez que hay una sentencia.
Dijo que se actúa sobre la condena fijada y que las sanciones de la institución a veces pueden ser más severas “porque la Justicia penal no maneja lo que es la ética”.
A las penas las fija la subcomisión de Ética del Colegio de Médicos y sobre casos que se relacionen con el ejercicio. “El tribunal de ética no se dedica a la investigación, le llegan las denuncias”, explicó Aguirre.
Fuente: El Tribuno