“Con respecto a tuberculosis, la provincia de Salta tiene una tasa superior a la media nacional, eso está relacionado con el mayor diagnóstico, porque se trabaja en forma intensiva en la búsqueda de sintomáticos respiratorios y en el estudio de contactos de personas que han sido diagnosticadas con la enfermedad”, afirmó el médico Juan Pablo Castillo, titular de la Dirección de Primer Nivel de Atención del Ministerio de Salud Pública.
El funcionario explicó que “el diagnóstico temprano es fundamental para que el paciente inicie tratamiento y evitar contagios, por eso se hace búsqueda activa de casos, en particular en los grupos de mayor riesgo o en áreas con altas tasas de notificación y eso se traduce en la tasa de notificación a nivel país”.
Castillo dijo también que “el aislamiento durante la pandemia produjo aumento de contagios, porque las personas permanecieron en su domicilio; si había alguien con tuberculosis, eso se tradujo en un incremento de casos pos pandemia a nivel internacional, porque sabemos que uno de los factores que favorece el contagio es el contacto estrecho con una persona enferma por cuatro o cinco horas diarias”.
En Salta se cuenta con métodos de alta tecnología para el diagnóstico de la tuberculosis, como un moderno aparato llamado GeneXpert, instalado en el hospital Señor del Milagro, que permite obtener resultados más rápidos en pacientes con poca cantidad de bacilos. “Hablamos de biología molecular, que nos da un diagnóstico dentro de las dos horas y además permite identificar la resistencia a una de las cuatro drogas de tratamiento, que es la rifampicina”, afirmó Castillo.
También la Provincia cuenta con otro moderno método de cultivo líquido, denominado MGIT, que permite conocer la resistencia a las drogas de tratamiento habituales en 15 días, lo que favorece el inicio temprano del tratamiento adecuado.
Además, en la red de laboratorios de toda la provincia se hace baciloscopía y se trabaja en articulación con los laboratorios del hospital Señor del Milagro.
“Salta es referente en el norte del país en diagnóstico y tratamiento de pacientes con tuberculosis y es un reconocimiento de las autoridades sanitarias nacionales al trabajo intensivo de búsqueda de sintomáticos respiratorios, que se hace en el Primer Nivel de Atención, a través de los agentes sanitarios, que son nuestra fortaleza”, dijo Juan Pablo Castillo, agregando que “nuestra provincia colabora con provincias vecinas como Jujuy, Tucumán y Catamarca en el diagnóstico de la tuberculosis”.
La patología no ha sido erradicada, está presente en todo el mundo, pero en la actualidad es totalmente prevenible con vacuna y curable si se la detecta a tiempo y se realiza el tratamiento adecuado y sin interrupción.
“Es una enfermedad estigmatizante, pero debemos saber que tiene tratamiento y se cura”, dijo el director de APS, Juan Pablo Castillo, acotando que “desde el programa de Tuberculosis se hace el estudio de contactos, tanto dentro del núcleo familiar como en el lugar de trabajo o estudio, porque tuvimos casos en muchas instituciones pública y privadas”.
En Salta se trabaja con el sistema de tratamiento directamente observado (TDO), que significa que el equipo de salud tiene registrados e identificados a los pacientes en tratamiento y les entrega la medicación en el domicilio en forma diaria, para evitar que se interrumpa la terapia. La provisión de los medicamentos es gratuita.
La tuberculosis es una patología infecciosa, que suele afectar principalmente a los pulmones y se transmite de una persona enferma a otra sana a través del aire.
Cuando un enfermo con tuberculosis pulmonar tose o estornuda, expulsa bacilos tuberculosos a través de gotitas de saliva que, si son inhalados por una persona sana, provocan el contagio.
- Es una enfermedad curable y prevenible con vacuna, que se coloca al recién nacido. Esta vacuna se encuentra dentro del calendario nacional de inmunización, por lo que su administración es gratuita y obligatoria.
- Además de la vacuna, la prevención consiste en mantener abiertos, ventilados e iluminados con luz natural los ambientes que se comparten con otras personas que pueden estar infectadas, como oficinas, aulas, vehículos de transporte público, para evitar la concentración de gérmenes.
La persona infectada debe:
- protegerse la boca con pañuelos desechables al toser, o usar barbijo.
- lavarse las manos correctamente.
- restringir el contacto con personas expuestas a contraer la enfermedad.
- seguir el tratamiento médico sin alterarlo.
- no fumar, ya que el tabaco favorece el desarrollo de la TBC.
Se debe consultar al médico ante la presencia de tos con flema por más de 15 días. Mientras más temprano se detecte la infección y se inicie el tratamiento, más rápido se corta la cadena de contagio a otras personas.