El día 13 de octubre el Ministerio de Salud de Salta en conjunto con el Ministerio de Salud de Nación emitió un alerta epidemiológico ante la detección de un caso probable de sarampión en la provincia.

Se trató de un varón de 20 años, con antecedente de vacunación con una dosis de vacuna triple viral, sin viajes recientes.

Presentó cuadro de tos, catarro y artralgias el 3/10 y el 6/10 agregó exantema vesicular y lesiones tipo aftas en boca por lo que consulta y se notifica la sospecha. El paciente evolucionó favorablemente con lesiones que progresaron a costras.

En la primera muestra de suero estudiada, tres días después del exantema, se obtuvieron resultados de IgG positivas para sarampión y rubéola e IgM negativas para ambos virus.

En la segunda muestra de suero, a los 7 días desde el inicio del exantema, la IgM para sarampión fue positiva por ELISA tanto en el Laboratorio de Referencia de la provincia de Salta como en el Laboratorio Nacional de Referencia (LNR) ANLIS Malbrán.

Las muestras para detección viral (orina e hisopado nasofaríngeo) tomadas en forma oportuna, fueron negativas para sarampión y rubéola por RT-PCR.

Considerando la presencia de Anticuerpos IgG en la muestra temprana de suero, el antecedente de vacunación en la infancia y la ausencia de detección de virus sarampión, se realizaron estudios para otros diagnósticos diferenciales -sospechando que el resultado positivo se debiera a un cruce serológico con una infección por otro virus distinto - obteniéndose resultando positivo por RT-PCR para el virus varicela-zoster en la muestra respiratoria.

En la investigación epidemiológica realizada no se identificó la fuente de infección, todos los contactos (familiares y de otros ámbitos) relevados y en seguimiento se encuentran asintomáticos.

En conclusión, se descarta la sospecha de sarampión.

Es importante recordar que para sostener los logros de eliminación de sarampión y evitar la reintroducción del virus al país, se requiere alcanzar y sostener altas coberturas de vacunación (95%) con dos dosis de vacuna contra el sarampión (doble o triple viral) y un sistema de vigilancia sensible capaz de detectar oportunamente los casos sospechosos y así evitar su reintroducción y diseminación.