En una situación que parece empeorar con el pasar de las horas, cientos de salteños se encuentran varados en las inmediaciones de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, debido a un paro que ha dejado bloqueada la ruta que una a la ciudad con Cochabamba. El motivo de esta travesía fue la peregrinación a la fiesta de la Virgen de Urkupiña, que congrega a miles de fieles cada año.
Desde la noche anterior, varios colectivos provenientes de la provincia de Salta se encuentran detenidos en la ruta, en una situación que se torna cada vez más crítica. Los afectados relatan que hay personas que llevan mucho más tiempo varadas, lo que agrava las condiciones.
El bloqueo de la ruta dejó a los peregrinos sin acceso a recursos básicos como agua, lo que llevó a una situación alarmante en la que algunos comenzaron a descompensarse, particularmente aquellos que son ancianos y que requieren medicación específica.
"Estamos mal, mal, mal", exclamó una de las afectadas desde uno de los colectivos al diario El Tribuno. "No tenemos agua, estamos atrapados y hay personas que necesitan su medicación, es una situación muy grave", agregó visiblemente angustiada.
La desesperación se siente entre los peregrinos, quienes muestran signos de agotamiento y preocupación por la falta de atención en caso de necesitarla.
"Más de 30 horas en un corte de ruta es como estar secuestrados. Vinimos a la peregrinación con la esperanza de celebrar nuestra fe, pero nos encontramos con esta situación desesperante", dijo un hombre que se comunicó con El Tribuno.
La peregrinación a la Virgen de Urkupiña es un evento que moviliza a una gran cantidad de fieles tanto en Bolivia como en Argentina.
En medio de la crisis, también se mencionó la percepción de un "trato sucio" que los argentinos, en especial los salteños, reciben en Bolivia.